El test de la contrarreloj
Los favoritos se enfrentan a los primeros 27,2 km de crono ● Thomas y Roglic están tocados ● Van der Poel defiende liderato
La contrarreloj de 27,2 kilómetros que unirá hoy Changé con Laval se convertirá en un nuevo test para los hombres de la general, ya que las carreteras de Bretaña no dejaron ni un respiro desde que el Tour salió de Brest. Geraint Thomas y Primoz Roglic, tocados por sus caídas en la tercera jornada, medirán su recuperación. Mientras, Mathieu van der Poel asume que perderá el ansiado liderato en memoria de su abuelo, Raymond Poulidor: “Frente a Julian (Alaphilippe), seguramente, porque tiene muchísima motivación por recobrar esta prenda y sacar tiempo a los demás en la primera semana”. El francés se encuentra a ocho segundos del neerlandés y tampoco esconde sus ambiciones: “Me encantaría agarrar de nuevo el amarillo. Correr con el jersey de líder del Tour da alas”.
Eso sí, Alaphilippe no aclara nunca sus intenciones. Pese a que en el pelotón le consideran uno de los favoritos, él siempre responde con evasivas: “Veremos hasta dónde llego. Guardo con un cariño especial la clasificación de 2019 (quinto), y pienso que puedo lograr un rendimiento parecido”. Richard Carapaz no oculta sus cartas. Tercero, a 31” de Van der Poel, dispone de 36” de ventaja sobre Thomas, con quien comparte galones en el Ineos: “Trabajé mucho en invierno para mejorar mis prestaciones en la crono. Pretendo minimizar las diferencias con mis adversarios”.
Wout van Aert, cuarto a 31”, también aparece como un potencial candidato a vestir de amarillo en Laval. Wilco Kelderman figura quinto, a 38”, con Tadej Pogacar, el defensor del título, sexto a 39”. Para el esloveno, se trata de “un día fundamental para conseguir un buen resultado”: “En esta edición la lucha contra el crono, con 58 km en total, condicionará cómo se afronte la montaña”. Enric Mas, muy atento en las trampas de Bretaña, marcha séptimo, a 40” del primer puesto: “Salvé los percances. Ahora, a tope y a realizar una contrarreloj que me permita continuar en las posiciones de privilegio”.
Thomas, a 1:07, y Roglic, a 1:35, están más lejos de lo esperado de las primeras plazas. El galés cedió en el Muro de Bretaña y se dislocó el hombro camino de Pontivy. El esloveno se cayó igualmente en la tercera etapa y se asemeja a “una momia” por la cantidad de vendajes que requieren sus erosiones: “Al menos no me rompí nada. Por suerte, falta muchísimo Tour y terreno favorable para recortar”.