Esperamos ver la mejor versión de Enric Mas

El Tour de Francia llega hoy a su primera crono, la que muchos pensábamos que sería la primera jornada importante de la carrera antes de que las caídas fueran protagonistas. Veremos cómo han afectado los golpes a Primoz Roglic o

Geraint Thomas, dos de los más perjudicados. Pero la afición española también está muy pendiente de qué versión veremos de

Enric Mas. El año pasado llegó diciendo que quería un top-10 y acabó quinto. Este año ya habló del podio. El mallorquín ha sido capaz de hacer grandes contrarrelojes en su carrera, como la de Torrelavega de

La Vuelta 2018 en la que acabó segundo. Es un ciclista con calidad suficiente para subir al cajón del Tour y tiene que tener esa mentalidad. Que se le vea más ambicioso es bueno. Luego la carrera le pondrá en su sitio, pero tiene que pensar a lo grande. Ha sido uno de los que mejor han salvado los incidentes de las primeras jornadas.

Ayer el pelotón quiso protestar, pero no puedo dejar de pensar que es una pantomima. Si los que se hubieran ido al suelo no se hubieran llamado Roglic, Thomas, Pogacar... imagino que no se hubiera protestado. Soy el primero que creo que hay que luchar por la seguridad, pero por sus cauces y estamentos, con las asociaciones de ciclistas y de equipos. No así. Ayer las carreteras eran igual de peligrosas que los días anteriores y no hubo caídas, porque no existía esa tensión que caracteriza al inicio de esta carrera. Yo he disputado las tres grandes y nunca viví lo que ocurre en el Tour. Una prueba que celebró el regreso de Cavendish, que rompió a llorar. Unas lágrimas que creo que expresaban que ni él mismo pensaba que volvería a conquistar una etapa de esta carrera. Es admirable la capacidad del Deceuninck de hacer que sus ciclistas den el máximo. Muchos se van y no vuelven a ser los mismos.