V de Vendetta: Luis Enrique, 27 años después
Dicen que la venganza se sirve en plato frío. Y tiempo para refrigerarse ha tenido. En concreto, 27 años. Los que han transcurrido desde aquella eliminación ante Italia en el Mundial de Estados Unidos de 1994; los que han pasado desde aquel codazo del defensa italiano Tassotti que sufrió Luis Enrique y lloró toda España.
La rabia se apoderó entonces del asturiano, protagonista de una imagen que nunca olvidaremos y de un golpe cuyo tabique todavía acusa. Pero ahora le ha llegado la oportunidad de redención. A él, español ejemplar, comprometido y furioso. Quien ha pasado del medio del campo al banquillo y de seleccionador a líder. Porque liderazgo, a Lucho, le sobra.
El seleccionador se relame
Luis Enrique tratará este martes de poner el penúltimo ladrillo a su gran obra. Y qué mejor manera de hacerlo que cerrando el círculo. Vengándose de la selección azzurra, de Tassotti y los Baggio, en el mítico estadio de Wembley y por un puesto en la final de la mejor competición continental de selecciones.
Creemos que, a estas horas, el asturiano estará relamiéndose. El guión, coprotagonizado por Unai Simón y Álvaro Morata, le ha salido a pedir de boca. Faltan solo dos pasos, cargados de tanta responsabilidad como morbo. Pero, ¿se imaginan que Lucho se venga de Italia 27 años después de aquel codazo? ¿Se imaginan que su Roja levanta la copa contra Inglaterra y en Wembley?