Lucho y Alba: triunfó el amor

Jordi Alba fue clave ante Suiza y su peso ha ido aumentando. Pero no siempre fue así. Su historia con Luis Enrique está lejos de ser idílica. Por suerte, las aguas se calmaron y hoy contamos con el catalán ante una Italia a la que ya goleó en la final de 2012.

Los problemas comenzaron en 2017, cuando el Barça se midió al PSG en los octavos de final de la Champions. Los culés cayeron 4-0 en París y Lucho culpó al lateral del destrozo que hizo Di María por su banda. Alba perdió protagonismo, mientras que Luis Enrique terminó tirando la toalla esa misma campaña.

El asturiano aceptó un año después la oferta de Rubiales para dirigir a la Selección española. El morbo estaba servido. ¿Llamaría a Jordi Alba? No, Luis Enrique lo dejó fuera a pesar de ser indiscutible durante siete años. Quizá a Jordi le pesaron sus palabras tras la salida del asturiano: “Seguro que ahora me va mejor que con Luis Enrique”.

Idas y venidas

El casting del lateral zurdo sí incluiría posteriormente al de L’Hospitalet de Llobregat, que regresó a una lista en 2018. Luego Luis Enrique dejó el cargo y a su vuelta prescindió del azulgrana. Alba, esta vez sí, parecía totalmente desahuciado tras 568 días sin ser llamado por el combinado nacional. El 15 de marzo de 2021, sin embargo, saltó la sorpresa. Lucho lo citó debido a su gran momento y Alba se ha mantenido dentro del equipo desde entonces, siendo incluso capitán en los dos primeros partidos de esta Eurocopa. Finalmente triunfó el amor.