Musa, el ejecutor
El bosnio iguala un récord histórico del Madrid con 6 triples sin fallo ● El Valencia solo aguanta 25 minutos
Ganar un viernes noche en Estambul, al Fenerbahçe, y rematar 48 horas después en casa ante el Valencia es el resumen de un magnífico fin de semana, el del Madrid. El equipo blanco encadena ocho triunfos entre ACB y Euroliga y ha ascendido a la segunda posición en ambas competiciones. Y lo que es más importante, sigue dando pasos firmes en su juego, en la integración de las piezas para potenciar el colectivo.
Una victoria frente a la escuadra taronja que llegó a tirones casi obligados por la cercanía de la batalla continental. Le bastó con un buen inicio y un fantástico remate en el tercer cuarto con un parcial de 24-7 para poner el +22 (56-34, minuto 28). Musa demostró que se le da bien el Valencia y, si en la Euroliga lo castigó con 28 puntos, esta vez fueron 22 con una aportación exprés y un 6 de 6 en triples que iguala el récord histórico merengue. Tavares y Deck también resultaron decisivos en el despegue y, de nuevo, la presencia de Williams-Goss (con él en cancha +32) le sentó bien a sus compañeros.
Hubo dos Madrid en el primer tiempo, el que salió en tromba (17-2) y asfixiaba al rival con Tavares llegando a todo dentro y fuera, y otro radicalmente distinto, que empeoró con las rotaciones. Perdió acierto y energía, se paró hasta encajar un parcial de 13-25. Sin Chris Jones ni Van Rossom, lesionados, Mumbrú dio minutos al canterano Guillem Ferrando (recuperado del Melilla) y la elaboración ofensiva mejoró con respecto a Harper. Pradilla y Prepelic ponían los puntos para alcanzar el descanso solo cinco abajo (32-27). Meritorio. Se echaba en falta más aportación de James Webb, que dejó fuera a Jasiel Rivero.
La lectura era de mal partido del Valencia con flojos porcentajes (26% en tiros de campo en la media parte), pero buen resultado. En progresión de echarse encima del Real en el tercer periodo. El baloncesto, sin embargo, no es aritmética y Chus Mateo recuperó el quinteto de salida y Musa y Tavares destrozaron al adversario. El alero apiló otros tres triples para un 6 de 6 de récord y 13 puntos en ese tercer acto, mientras que Tavares añadió 7 tantos y era un factor en todo el campo. Y ojo a Williams-Goss, que esta vez acumuló más minutos y encaja muy bien con Musa. Permite a Mateo tener un base buen defensor de exteriores en pista que en ataque se alterne con el balón en la mano con el bosnio. El latigazo de 24-7 en la bienvenida de la segunda parte acabó con las matemáticas de la remontada taronja. El Madrid se queda solo en la persecución del líder.