AS

Un Livakovic de leyenda

Croacia comienza a recorrer el camino de 2018 y pasa por penaltis Las tres paradas del portero balcánico amplían la maldición de Japón en octavos

- JORGE GARCÍA

D ominik Livakovic se encargó en Al Janoub de ampliar la leyenda croata en los Mundiales, la de su capacidad agonística y la de una fe sin límites. La Croacia de Dalic flirteó con el desastre y volvió a sobrevivir gracias a las poderosas manos de su portero en la tanda de penaltis. Japón murió en la orilla. Moriyasu no pudo completar su obra y superar la maldición nipona de los octavos de final tras un partido muy pobre por ambos bandos. El duelo comenzó inquieto para Japón. Tomiyasu, encajado como tercer central, se equivocó gravemente ante Perisic y el extremo croata se plantó ante Gonda esperando a Petkovic, pero acabó estrelland­o su remate en el potero nipón. Fue un espejismo de arranque, porque Croacia inmediatam­ente comenzó a sentirse incómoda ante el fútbol directo japonés. Diagonales largas y a acelerar por fuera. Pero con eso era suficiente para ver de cerca a Livakovic.

Era el mundo al revés, la imponente zaga croata sufriendo ante centros laterales de Junya Ito y Nagatomo, buscando al menudo Maeda. Barisic las pasaba moradas con cada latigazo de Ito en velocidad y Dalic se desesperab­a pidiendo al del Celtic que le fijara antes de recibir. Iban 20 minutos y Croacia ya acusaba la falta de Sosa. Los ajedrezado­s respondier­on de la manera más extraña, con un pelotazo de Gvardiol para quitársela de encima que dejó a Petkovic en posición franca dentro del área, pero el ariete balcánico se fue a fundido a negro. El partido respondía a la previsión, una batalla larga y por episodios, hasta que desequilib­ró el laboratori­o de Moriyasu. Kamada había tenido la más clara antes de que un córner en corto continuara con un centro de Doan que Yoshida ganó para que Maeda rompiera el empate. Todas y cada una de las acciones anteriores a balón parado niponas llevaron el sello del entrenador asiático. Nada se improvisa en Japón. Poco de Perisic, poco de Modric y nada de Kovacic en un primer tiempo donde Croacia no había sintonizad­o con el partido.

En la reanudació­n Dalic cambió el blanco de sus iras. Petkovic le sacaba de quicio. Con Croacia plana y sin ideas, era el momento recurrir al orgullo de la vieja guardia. Y apareció. Lovren descargó un centro lejano y Perisic se adelantó a la zaga nipona para igualar de cabeza. Croacia se metía en la pelea y percibía que ya estaba en su salsa, con Modric, inmediatam­ente obligando a Gonda a lucirse. Moriyasu ya no se sentía dominador y buscaba refresco con Asano, mientras esperaba que las transicion­es obligaran a Croacia a descoserse. Pero para Dalic no era un problema, puso en el campo al llegador Pasalic y cambió de delantero. Pero la versión de Budimir no mejoraba a la de Petkovic. Croacia se estiraba sin dientes y Japón miraba a la prórroga. El alargue estaba servido.

Las dos capacidade­s agonística­s más inquebrant­ables se sumieron en la primera prórroga de la Copa del Mundo. Croacia había sobrevivid­o a tres, con dos tandas de penaltis incluidas en Rusia 2018, así que llegaba con la mili hecha. Pero el tiempo extra trajo una sorpresa. Dalic sacaba del campo a Modric y a un desdibujad­o Kovacic para dar entrada a Majer y a Vlasic. Un sintomátic­o cambio de guardia. Hasta el intervalo, sólo un acelerón de Mitoma con disparo centrado sacó al Al Janoub del letargo. El segundo acto fue igual de mortecino, con Majer intentando alimentar el lánguido ataque croata y Japón esperando divisar una contra certera. Los penaltis ponían el justo final a un partido intenso, pero pobre. Tiempo de héroes. Y las manos de Livakovic agarraron el pase a cuartos. El portero del Dinamo de Zagreb detuvo los lanzamient­os de Minamino, Mitoma y Yoshida, mientras que Pasalic remató la faena.

 ?? ??
 ?? ?? Moriyasu se dirige a sus jugadores al acabar el partido con Livakovic, el héroe del mismo, detrás levantando los brazos.
Moriyasu se dirige a sus jugadores al acabar el partido con Livakovic, el héroe del mismo, detrás levantando los brazos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain