Paik, un gran viaje de La Masia al Mundial
Víctima de la sanción FIFA, pasó por el Girona
Seung-Ho Paik se colocó, con su golazo a Brasil (4-1), en el escaparate del fútbol mundial. En su debut en Qatar, el centrocampista solo necesitó diez minutos (jugó 25’) para dejar su huella. No se trata de un jugador desconocido. A sus 25 años, ha tenido que labrarse día a día una carrera que empezó en el Barcelona y, hasta la fecha, ha sido una montaña rusa.
Llegó siendo infantil al Barça y no tardó en encontrar trabas a su sueño porque fue uno de los afectados por la sanción que la FIFA impuso al club blaugrana por fichar menores de edad. Algunos optaron por irse, como Take Kubo, pero él siguió. Fue paciente y aguantó hasta que llegó al Barcelona B. Con 18 años y la sanción superada, Paik llegó al filial culé, que iba a jugar en Segunda División, pero la llegada de los extracomunitarios Vitinho y Choco Lozano le barraron el paso.
El técnico Gerard López le instó a buscarse equipo y entonces las puertas del Camp Nou se le cerraron de manera definitiva.
Ofertas no le faltaron y la que más le llamó la atención fue la del Girona. El club rojiblanco vio en él una apuesta clara de futuro, la primera de ellas para competir en el Peralada, que por aquel entonces era su filial. Allá que fue en 2017 y ese año se considera el del primer resurgir de Paik.
En Girona logró derribar la barrera del fútbol profesional, pero tampoco se consolidó. Sí aprovechó la oportunidad para ganar confianza y en 2019 se marchó a Alemania, al SV Darmstadt 98.
En el segundo año fue perdiendo protagonismo y en marzo de 2021 regresó a su país. En Corea del Sur, en el Jeonbuk Hyundai, sí que está logrando continuidad y se le ve como uno de los mejores centrocampistas del país.
Renacer Cuando se le cerraron las puertas del Camp Nou recaló en el Girona