Delirio de grandeza blanco
El Madrid va por delante durante 23’, pero un penalti de Ivana supone el empate
Apunto. El Real Madrid tuvo al Chelsea contra las cuerdas e incluso fue por delante en el marcador durante 23 minutos, pero todo quedó en delirio de grandeza. Ivana cometió penalti y el empate llegó de la espalda de Misa tras el disparo al palo de Reiten.
Volvió la defensa de tres de Toril, menos cuando el Madrid tenía el balón. Cuando no, la línea de cuatro, con Ivana de lateral derecha, quedaba claramente dibujada. A las blancas no les importó ceder el control del esférico desde el pitido inicial y el choque comenzó con dos córners seguidos a favor de las visitantes con la advertencia seria de una de las mejores del mundo: chut al larguero de Sam Kerr. No habían venido de paseo a pesar de la ventaja de cinco puntos. El cuadro blanco quería sacudirse a las inglesas de encima y cuando lo conseguía salía al contrataque como caballo desbocado. Athenea lideraba la carrera. En el 18’ recibió a la espalda de la defensa blue y buscó a Weir en el punto de penalti. Buchanan evitó el remate de la escocesa, pero el plan estaba claro. Y funcionaba. Los ataques de las de Hayes se congelaban. No encontraban espacios. Carmona probó el chut desde la frontal en el 24’, pero se fue por un pelo. El mismo que hizo que el segundo remate de Kerr también acabase en la madera. El Madrid no tuvo que lamentar la terrible pérdida de Zornoza y sí lo hizo el Chelsea con la mala entrega de Berger, que en el 31’ entregó el cuero a Weir, en la frontal, con toda la portería para ella. Poco más pasó hasta el penalti cometido por Ivana en el 57’. Reiten lo chutó y el balón dio en el palo y en la espalda de Misa antes de besar la red. El Madrid, tercero de grupo, se jugará el pase a cuartos en París.