Munuera perdona demasiado en la primera parte

El Caso Negreira. El día comenzó con la comparecencia de la RFEF y el CTA para dar algunas explicaciones a raíz del Caso Enríquez Negreira. Me siento reconfortado con la unión arbitral, con los que han estado y con los que no han podido, pero se han adherido. Pero también un poco triste porque está calando la idea de que el fútbol está corrupto. Por el bien de todos, esto hay que aclararlo cuanto antes. Había que dejar en anécdota lo de Estrada Fernández, y ha parecido que era lo más importante.

Munuera Montero. Es un buen árbitro que está en gran forma. Suele pitar mucho al inicio para controlar el partido, pero en este caso no fue así. Perdonó algunas amarillas que calentaron el encuentro. Cuando te vas equivocando, los jugadores se van encendiendo y complican aún más el partido. Si hay que expulsar a un jugador, se le expulsa, sea del equipo que sea. Al final, si no lo haces, eres injusto. En la segunda parte estuvo mejor.

Minuto 24. Amarilla a Vinicius por un forcejeo con De Jong. Es de las amarillas más claras de este año, así que es poco entendible que se quejase el brasileño de esa manera, tanto que Munuera le perdonó la segunda amarilla. Un árbitro no puede permitir a un jugador ese comportamiento contra una de sus decisiones, señalándole con el dedo y encarándose con él.

Minuto 26. Gol en propia puerta de Militao. En principio se señaló fuera de juego de Kessié, pero la repetición dejó claro que, por poco, pero era un gol totalmente legal.

Minuto 29. Amarilla perdonada a Gavi por una falta clara a Camavinga sin balón.

Debió ver la amonestación, algo que sí haría en la segunda parte.

Minuto 39. Amarilla de libro que no recibió Araújo tras interrumpir una carrera de Vinicius sin balón de por medio. Dio ley de la ventaja y pareció que iba a enseñarla al acabar la jugada, pero no fue así. Error.

Minuto 40. Otra amarilla perdonada a Gavi por una falta sobre Militao en la que fue con el brazo arriba, a la altura del cuello del brasileño.

Otras acciones. En la segunda parte Munuera Montero estuvo mucho más acertado, pitando lo que debía pitar. Vieron amarillas justas Nacho, por agarrar a Raphinha, y Kessié, por un claro manotazo a Carvajal para hacerle falta.