“Hasta hace poco me planteé ir al extranjero”
Asier Illarramendi
Illarramendi (Mutriku, el miércoles cumple 33 años), el capitán de la Real con casi 250 partidos a sus espaldas como txuri-urdin, no sabe qué va a hacer con su futuro. Termina contrato y no tiene propuesta para renovar. Habla de su pasado, presente y futuro. Y también, claro, de su compañero Le Normand y su llamada de la Selección.
—Después de perder contra el Valencia se habla de que están en un bache.
—Me hace gracia, porque venimos de un empate y de una derrota. Y que se hable de bache por esos resultados por una parte es bueno, porque significa que la gente se ha acostumbrado a otra cosa. Los que estamos dentro ya sabemos que esto es largo y que durante el año hay partidos en los que te cuesta ganar más y otros, menos. —Por fin se le ve disfrutar sobre el campo y esta temporada es el único jugador de campo que no se ha lesionado. ¿Está en su mejor momento desde que superó su calvario? —Sí, claro. De los últimos cuatro años sí que es mi mejor momento. He tenido dos lesiones importantes y otras menos, y entre una cosa y otra, no he encarrilado entrenamientos seguidos. —¿Cómo fue ese proceso de lesiones y recaídas constantes? —Duro. Yo he tenido muy mala suerte con las dos operaciones.
—¿Se le llegó a pasar por la cabeza la retirada como le pasó a Agirretxe?
—No tanto como la retirada, pero sí que al final te entran muchas dudas de cómo ibas a volver. El deporte de alto nivel no es fácil, y si pierdes un año es difícil entrar de nuevo. He tenido dudas no de mí, pero sí del físico, porque después de todo lo que me había pasado es difícil saber también dónde estás, a qué nivel y cómo vas a volver.
—¿Uno de los momentos más duros fue cuando se lesionó la víspera de la final de Copa en La Cartuja?
—Sí, fue complicado aquel momento. Llevaba dos o tres semanas entrenando bien con el grupo y cogiendo sensaciones, y en el calentamiento previo sentí algo en el gemelo, pero dije: ‘No es el momento de decir nada en vísperas de la final’. Seguí entrenando, y justo cuando golpeé el balón sí que ya me dio de verdad un latigazo. Más que dolor físico fue mental. Por suerte, al día siguiente salió todo bien y quité la pena que tenía.
—¿Se ha arrepentido del paso que dio fichando por el Madrid? ¿Repetiría ahora? —Deportivamente no me fue muy bien, pero ya sabemos lo complicado que es allí. A nivel personal me ha servido de mucho. He crecido un montón. Antes vivía en mi zona de confort con mis amigos y mi familia, y me sirvió para dar un paso más como persona, para buscarme la vida y para madurar. Por esa parte no me arrepiento. En lo futbolístico no salió como quería, pero son cosas que no puedes predecir: saltas al vacío y tampoco sabes cómo va a acabar. —Pasado, presente y futuro. ¿Cómo va la renovación?
—La verdad es que no sé nada, es una decisión difícil para mí. Quiero ver cómo acabo tanto física como mentalmente y luego decidiré. Cada año queda menos tiempo. —¿Qué tiene que pasar para que renueve?
—Sobre todo, sentirme importante, válido, y estar bien físicamente. Viendo el ritmo que tiene la competición, de dónde vengo, tenía dudas. Ahora estoy mejor, y eso me hace cambiar.
—Si no siguiera en la Real Sociedad, ¿le gustaría probar la aventura en el extranjero? —También lo he pensado. Hasta hace unos meses me planteé algo así, porque, visto lo visto, el equipo estaba a un nivel increíble, y los que estaban jugando estaban haciendo unos partidazos que hacían difícil entrar.
—¿Qué piensa del asunto de Le Normand y la Selección española?
—Me sorprendió. Robin tiene nivel para eso y mucho más, pensaba que iría con la selección francesa. Estaría esperando la llamada de la selección francesa, y como no llegaba, recibió justo la de la Federación Española y dijo que sí.
Le Normand
“Tiene nivel para ir con España, pero pensé que jugaría con Francia”