Un serio Cádiz aumenta las dudas de la Real Sociedad
Un equipo irreconocible otra vez, ante un rival con orden defensivo
Empate a nada en Anoeta entre la Real Sociedad y el Cádiz. Los locales porque definitivamente no están. Los visitantes porque no quisieron, se dedicaron precisamente a que no se jugara, y les salió bien porque realmente el partido transcurrió por los derroteros que ellos quisieron. Sergio González supo leer la desesperación de la Real y con su entramado defensivo le terminó de desesperar todavía más. Y es que tuvo hasta la mejor ocasión de toda la segunda parte, con un remate al palo de Roger. Se limitó a hacer su partido, impidió jugar a la Real como premisa absoluta y por todos los medios, y se llevó un punto que vale oro en su lucha por salvar la categoría.
La Real ya no es la Real. No al menos la Real que había maravillado a todo el mundo en la primera vuelta. Ha perdido su duende y ya no tiene fluidez con balón, porque le cuesta mucho generar peligro a través del juego. Es inexplicable cómo se ha caído el equipo donostiarra en los últimos partidos, repleto de dudas y temores. Unas dudas que se palparon en Mestalla y se confirmaron en el Reale Arena. El Cádiz las aumentó. Sólo ha sumados seis puntos en los últimos seis partidos. Y todo le llega en el peor momento, en el más decisivo de la temporada, a las puertas de la exigente eliminatoria europea contra la Roma. O reacciona, o el sueño de la Champions puede convertirse en pesadilla. Está a tiempo.
En la primera parte fue la Real Sociedad la que intentó llevar la manija del partido. Pero se quedó en eso, en un intento, porque realmente no lo llegó a conseguir. O no al menos como pretendía. Porque el Cádiz le hizo el partido muy incómodo, con una presión intensa.
La segunda parte varió poco. Un contragolpe fatal defendido por una defensa realista sobrepasada que terminó a trancas y barrancas en los pies de Roger, acabó pegando en el palo. Los txuri-urdin llevan este año ocho victorias en casa y 14 fuera.