Sainz empieza con algún interrogante
El español tiene un viernes gris
La primera jornada de entrenamientos dejó al garaje de Ferrari un poco frío, vista la aparente superioridad de Red Bull y la inquietante presencia de Aston Martin. Nadie duda que el SF-23 es un coche capaz de ganar carreras, pero no está tan claro que vayan a saber extraer todas sus prestaciones en el GP de Bahréin y empezar la temporada con buen pie. Leclerc hizo cuarto, Sainz no pudo cuajar una buena vuelta en los Libres 2 con problemas de tráfico (y un susto por la mañana). Parece más grave la aparente falta de sensaciones del piloto español con el monoplaza, con menos ritmo que en los test.
“El coche no responde exactamente como espero, o como hacía en los test. Sufro un poco más con el balance, está algo más fuera de sitio. Esperamos arreglarlo para mañana”, explicó Sainz tras bajarse del Ferrari. Confía en que los técnicos encuentren el problema y reajusten el set-up: “Perdí tiempo en pista y probablemente pagué el precio en los Libres 2. El coche no se siente igual que en los test y estamos intentando analizar por qué. Las condiciones de la pista cambiaron un poco y parece que hay un cambio de prestaciones. Lo analizaremos por la noche”.
Confianza. “Si el coche se siente como en los test y yo hago una buena vuelta, la parrilla está muy apretada y estamos en la pelea”, asegura Carlos, a quien no le preocupa la degradación del Ferrari: “Todos sufriremos con la degradación, que fue uno de nuestros puntos débiles el año pasado”. No mira al Aston Martin como un invitado inesperado porque en la Scuderia la prioridad es sacar todo el potencial a un monoplaza que prometía un poco más: “Ya lo dijimos. Esperábamos que (los Aston Martin) estuvieran en la pelea, aunque nos centramos en nosotros mismos”.
Impresión “El coche no responde como en los test, sufro con el balance”