Dani Olmo y Xavi Simons dan alas al Leipzig
Cuatro presencias en octavos demuestran su consolidación
En verano perdió a tres titularísimos como eran Szoboszlai (Liverpool), Nkunku (Chelsea)y Gvardiol (City), pero no ocurrió absolutamente nada. Llegaron Openda, Šeško, Simons... Un equipo que con Marco Rose al frente del banquillo tiene una idea muy clara de juego y una gran velocidad en sus atacantes.
El RB Leipzig sigue ahí. Un añito más. En sus últimas cinco participaciones en la máxima competición continental, el conjunto patrocinado por la Red Bull se clasificó para octavos de final en un total de cuatro ocasiones, poniendo a prueba que ya se ha consolidado entre los grandes del continente. Lo ha hecho gracias a una filosofía y un estilo táctico que no varían, independientemente de jugadores que puedan llegar o marcharse del Red Bull Arena. Justo ahí está la clave de su éxito desde que ascendiera a la Bundesliga en 2016.
Presión alta, fútbol vertical y jugadores capaces de marcar la diferencia en todo momento son las señas de identidad de un Leipzig que para nada le pondrá fácil la cosa al conjunto español en la próxima fase de la máxima competición continental. En verano perdió a tres titularísimos como fueron Szoboszlai (Liverpool), Nkunku (Chelsea) y Gvardiol (City), pero no pasó absolutamente nada. Llegaron Openda, Šeško y Xavi Simons para mantener al RB en la zona noble de la Bundesliga (va tercero) una temporada más. Sobre todo la perla neerlandesa, cedida por el PSG, ha caído de pie en Sajonia. Suma seis goles y nueve asistencias en lo que va de temporada.
Sin embargo, el futbolista que hace mejores a todos los recién nombrados es Dani Olmo. Una lesión en el hombro le mantendrá fuera hasta 2024, pero el internacional español volverá a estar en plenas condiciones para los dos choques de octavos. En tan sólo siete partidos disputados a lo largo de este curso, el de Terrassa ya suma seis dianas y una asistencia que confirman lo que es para este Leipzig: una de sus grandes esperanzas a la hora de repetir su hazaña de la 19-20, temporada en la que llegó hasta las semifinales de la Champions.
Artífice. Mucha culpa de que los sajones puedan soñar a lo grande la tiene Marco Rose. El técnico lleva el ADN Red Bull en su sangre dado que dio sus primeros pasos en los banquillos del Red Bull Salzburgo, club hermanado con el Leipzig en el que dirigió la Sub16, la Sub-18 y también el primer equipo. Después de pasar por Gladbach y Dortmund, el exfutbolista regresó en 2022 al departamento futbolístico de la multinacional de las bebidas energéticas para devolver esa solidez al Leipzig que había perdido bajo las órdenes de Domenico Tedesco. Con él en el timón, el Leipzig defiende mejor, sorprende en escenarios como el Etihad y vuelve a hacer muchísimo daño cuando se le permite correr.
Olmo
El español, lesionado en un hombro, llegará a tiempo para la cita