Puente aéreo
El Madrid vuelve a Belgrado, donde jugó cuatro veces el curso pasado y ya lleva dos este ● Campazzo y Hanga, vidas cruzadas
El Madrid encara en Belgrado, la Ciudad Blanca, la cuarta doble jornada de la temporada. En las tres anteriores ganó los seis partidos, aunque la derrota con el Fenerbahçe llegó tras haber disputado 48 horas antes el aplazado frente al Maccabi en lo que puede considerarse oficiosamente otro doble turno. Los blancos acumulan más de un 75% de victorias en estos compromisos encadenados. El siguiente, a distancia, es el Barça con un 64%. Se presenta otra semana de aúpa, que acabará el sábado en Badalona en la previa de la Nochebuena. Y que empieza hoy en Belgrado, en un vuelo de algo más de tres horas desde Madrid. Un desplazamiento que se ha convertido en un nuevo puente aéreo para los merengues, incluso con vidas cruzadas, las de Campazzo y un Adam Hanga que podría volver a jugar justo hoy tras perderse las últimas ocho jornadas.
Solo en esta fase, el Madrid viajará tres veces a Belgrado, ahora para visitar al Estrella Roja y el 21 de marzo para medirse con el Partizán, ambas con el gigantesco Stark Arena de los 20.000 aficionados como escenario. Y ya lo hizo el 28 de noviembre, sin público y en la sala Pionir, la cancha de acogida del Maccabi. Una Ciudad Blanca donde el Real disputó el curso pasado cuatro encuentros para levantar la Undécima, incluidos los dos decisivos del playoff. En 2022 se quedó allí a una canasta del título en la Final Four y en 2018 levantó la Décima. Belgrado, una de las cunas del baloncesto continental, también marca al Madrid y a sus jugadores.
Campazzo regresa a la que fue su casa durante seis meses. Se enfrenta al equipo con el que ganó la Liga (sin el Partizán) y la Copa serbia, donde se readaptó al baloncesto europeo tras la NBA. Transmitió pasión y será bien recibido. De rojiblanco estará Hanga, el alero húngaro que se liberó al celebrar la Euroliga con el Madrid en Kaunas. Un tipo queridísimo en el vestuario, pero que salió en verano. Adiós a España después de 11 temporadas entre Manresa, Vitoria, Barcelona y la capital. “Espero que nuestros caminos se vuelvan a cruzar. Un abrazo para todos y... ¡Hala Madrid!”, escribió en su carta de despedida.