Conmoción mundial
El atletismo muestra su tristeza ante la muerte de Kelvin Kiptum, plusmarquista de maratón
El atletismo quedó helado con la muerte del plusmarquista mundial de maratón (2h00:35), el keniano Kelvin Kiptum, con 24 años. El atleta falleció junto a su entrenador, el ruandés Gervais Hakizimana, en un accidente de tráfico en la carretera que une Eldoret con Kaptagat. Según las autoridades locales, Kiptum perdió el control de su coche, chocó contra un árbol y cayó en una zanja.
Las primeras informaciones llegaron desde el país natal de Kiptum. Hasta el mánager del atleta, el neerlandés Marc Cortjens, que intentó contactar con su representado y su entrenador de forma inútil, no se podía creer lo que estaba leyendo. Poco después, World Athletics confirmaba la tragedia. “Estamos conmocionados y profundamente entristecidos. Un atleta que deja un legado increíble”, compartía su presidente, Sebastian Coe. Yago Rojo, uno de los mejores maratonianos españoles (2h07:47), compartía sus sentimientos. “No tengo palabras. Era el elegido. Le recordaremos como el más rápido”.
La noticia corría como la pólvora y los mensajes de tristeza se multiplicaban. “Estoy consternado”, decía Juan Carlos Higuero, plurimedallista español de mediofondo. “Conmocionados”, ponía la organización de la Maratón de Londres, uno de los dos majors (junto a Chicago) que el keniano ganó, además de Valencia, en su prometedora trayectoria. Tres maratones, tres victorias y tres marcas entre las seis mejores de la historia. Una leyenda para siempre.
Otro mito, el ídolo de Kiptum, Eliud Kipchoge, con el que iba a librar el gran duelo de los Juegos de París, también mostraba su pesadumbre. “Me entristece profundamente enterarme de la trágica pérdida de Kelvin. Que su recuerdo sea una fuente de consuelo y fortaleza”.
Martín Fiz, campeón del mundo de maratón en 1995, trasladó su tristeza en redes. “Amanecer triste. Compungido, desolado. Kiptum, el atleta más rápido del mundo en los 42,195 km, nos deja, se nos va… Al mundo del atletismo y del deporte nos deja con la miel en los labios. DEP. Talento, trabajador y con el desparpajo de cualquier joven. Todo mi pesar”. “En nuestra memoria guardaremos las hazañas del atleta que estaba llamado a desafiar los límites humanos”, compartía el CSD. El sentimiento del mundo del atletismo, y del mundo en general, ante un adiós tan doloroso como prematuro.