Temiendo una dura sanción a Sarr
Me temo que no podemos esperar nada bueno de la decisión del juez único en el caso de Cheikh Sarr. Al decir bueno me refiero a algo que sosiegue el ambiente y atenúe la imagen racista que por el fútbol nos estamos labrando. La intervención del árbitro fue gasolina en el fuego. Actuó por puro reflejo condicionado al ver al meta sujetando por la bufanda a un espectador y le expulsó. Luego, la indignación del muchacho le hizo pensar que pretendía agredirle, y la retirada del equipo terminó de hacerle sentirse ofendido. Así que su redacción del acta fue un Cheikh Sarr a la parrilla, con los compañeros de equipo como guarnición.* ¿Hubiera hecho lo mismo de saber que provocó el caso un insistente insulto racista? Ya es tarde para lamentarse por eso. Hizo lo que le dictó su reflejo condicionado. Y ahora el juez único tendrá que meterle ocho partidos, aplicando los dos mínimos: cuatro por agredir a un espectador, cuatro por intento de agresión al árbitro. Remotamente podría dejar lo del espectador en uno, dos o tres, aplicando un paliativo difícil de encajar aquí, y ya no serían ocho, sino entre cinco o siete. Pero, aun así, ¿podemos pensar que se ha hecho justicia? ¿Cómo nos mirará Senegal? Pues igual que Brasil por el largo caso de los escraches a Vinicius. Y qué más países. Somos noticia por esto.
Urgen otros protocolos, urge otra firmeza, necesitamos soluciones draconianas. Y también ir todos a una. No es bueno que los ofendidos, en este caso Cheikh Sarr, se tomen la justicia por su mano, ni que el equipo en bloque se retire, pero cuando eso ocurre es que los insultos han llegado a doler profundamente, por su insistencia. El propio portero lo explicó bien ayer. Esto se ha tolerado demasiado tiempo y se ha traducido en un problema muy serio de reputación del país, que hoy será fatalmente agravado con la dura sanción que espera al ofendido y la pérdida de puntos del Rayo Majadahonda por la defensa de su compañero.
¿Cómo nos mirará Senegal? Pues igual que Brasil por el largo caso de los escraches a Vinicius”