Nico, Sancet y Vivian, bien ante De la Fuente
Los dos primeros crearon el empate del Athletic
Sancet, Nico Williams y Vivian cargan de razones a Luis de la Fuente, que vio el partido en el palco de La Cartuja. Son, junto a Unai Simón, los tres futbolistas del Athletic que aparecían en la lista de marzo, la última que ofreció el seleccionador de España antes de la citación definitiva para la Eurocopa de Alemania. Los tres mostraron el gran nivel al que están acostumbrando durante buena parte de esta temporada, sobre todo los dos que jugaban más cerca de la portería de Greif. Entre Nico y Oihan se inventaron el empate cuando ya había comenzado la segunda mitad.
Nico comenzó aparentemente nervioso y cometió algún fallo de los que extraña en él, como un pase atrás fallido que se convirtió en la primera aproximación de peligro del Mallorca. Pero pronto el menor de los Williams se entonó para cargarse su equipo a las espaldas en busca de la igualada y volcar buena parte del peligro vasco por su banda izquierda. Anotó un 1-1 que acabó anulado por fuera de juego, mandó un mano a mano al lateral de la red antes del descanso y a poco de volver de los vestuarios se inventó un pase maravilloso a Sancet para que esta vez el tanto sí subiera al marcador.
Oihan, en eso que sabe hacer tan bien, supo moverse a la perfección entre líneas y buscarle las cosquillas a la defensa mallorquinista. Y definió a la perfección. Aparcó entre Samu, los centrales y los interiores y acaparó balón durante muchas fases del duelo. Su tremendo despliegue físico provocó que Ernesto Valverde tuviera que cambiarle para los compases finales del encuentro.
Vivian sufrió al comienzo con Muriqi y Larin. El canadiense, de hecho, le madrugó en una galopada que pudo significar el 2-0. Pero luego el central se rehízo para no darle una sola ocasión más a los dos delanteros, hasta el punto de que Aguirre prescindió de uno de ellos durante buena parte del encuentro. Cuando finalizaba el partido, el defensa pudo evitar que se llegara a la prórroga cuando se animó en ataque y lanzó un derechazo que se envenenó y puso en muchos apuros al cancerbero bermellón. Un futbolista, el vitoriano, que crece cada partido que pasa y oposita a convertirse en una de las grandes referencias defensivas de La Roja.
El central Pudo con Muriqi y además se inventó un gran disparo casi de gol