Los cambios de Xavi hunden a Luis Enrique
Pedri asistió magistralmente a Raphinha en su primer balón y Christensen firmó el gol de la victoria
Luis Enrique, en la previa, quiso convertir el partido en una lucha de egos entre él y Xavi sobre quién tenía más pedigrí en el estilo de juego del Barça, dándose como ganador fuera de cualquier duda. Nadie acabó de entender demasiado bien a qué venía esa crítica tan directa que sorprendió muchísimo porque el egarense jamás había tenido malas palabras por su homólogo asturiano. No quiso responderle en la sala de prensa, más bien al contrario pues dijo que era uno de los mejores entrenadores del mundo, y antes del partido se les pudo ver a los dos bromeando en el túnel de vestuarios sobre lo ocurrido en sus respectivas ruedas de prensa.
Donde si que contestó Xavi Hernández fue en el campo, ganándole la partida a Luis Enrique con los cambios, que fueron decisivos para que el Barça se llevara el triunfo del Parque de los Príncipes en un partido intenso y en el que los azulgrana supieron aguantar el arreón inicial del PSG con un gran orden defensivo. El conjunto parisino fue capaz de darle la vuelta al 0-1 inicial de Raphinha a los cinco minutos del segundo tiempo con el golazo de Dembélé y el de Vitinha, que entró con asombrosa facilidad en el área del Barcelona.
El pie de Pedri. Yendo abajo en el marcador, Xavi hizo entrar a Pedri en el campo. El canario todavía no está al cien por cien pero su magia es infinita. En el primer balón que tocó mandó una asistencia preciosa para que Raphinha empalmara un balón sin dejar que tocara el césped para firmar el empate a dos.
El centrocampista canario se situó en la parte baja del famoso cuadrado de Xavi y cogió la manija del juego del Barça. Pocos se esperaban que regresaría a un nivel tan alto después de su tercera lesión muscular, pero lo cierto es que Pedri dio síntomas de estar mejor de lo esperado.
Pero no acabaría aquí la respuesta de Xavi a Luis Enrique. Faltando un cuarto de hora para el final del partido decidió meter en el campo a Christensen para aportar un poco más de consistencia al equipo y fue el danés el autor del tercer gol al marcar de cabeza. Prácticamente también en el primer balón que tocaba. Y se desbordó la alegría en Xavi.
Sin broncas Bromearon antes del partido sobre la polémica en la previa del duelo