Scottie Scheffler abre una nueva era
El estadounidense conquista su segunda chaqueta verde en Augusta
■ Amortizada hace tiempo la ‘era Woods’, aunque aún no se pueda descartar la posibilidad de que el Tigre gane otro grande, y desde luego él no parece por la labor de hacerlo, ayer se confirmó que asistimos a la ‘era Scheffler’, que consolidó su trayectoria como categoría histórica con una segunda victoria en el Masters de Augusta, rematada con un -4 para -11. Para enfatizar el cambio de tercio, Tiger completó con un +5 para +16 y la 60ª plaza, última entre los que pasaron el corte, la peor aparición de su carrera en un torneo que ha ganado cinco veces.
No es que los resultados acumulados por el texano de 27 años, estrella atípica carente de ego, entre su primera chaqueta verde y esta invitaran a pensar lo contrario. Es más, si a alguno le pusieran delante su curriculum sin el nombre en el encabezado seguramente el primer golfista que les vendría a la cabeza sería el Tigre.
Hablamos de 51 top-10 en 120 torneos jugados, 38 top5, nueve victorias, dos grandes, 101 cortes pasados.
Hablamos del tercer jugador en los últimos 40 años en ganar sus primeros seis torneos en 400 días, del único junto a Woods y Nicklaus que ha sido campeón en vigor del Masters y The Players a la vez.
Podría decirse que Scheffler olía a ganador de cabo a rabo del torneo, pero lo cierto es que el aroma venía de antes. Empezó la temporada quinto en Kapalua y abrochó otros cuatro top-10 antes de despegar en marzo: victoria en el API, victoria en The Players y un segundo puesto en Houston antes del Masters, que comandó desde el viernes, entonces colíder, y el sábado ya en solitario. Nunca tuvo la mejor tarjeta del día, nunca derrapó. El par de la segunda vuelta fue su peor resultado. Pura solidez.
Cuando hizo birdie ayer en el 13 y alcanzó el -9 con tres de renta, al final cuatro sobre el sueco Aberg, fabuloso en su primer grande, era vox populi que el pescado estaba vendido. Poco después Jon Rahm, 45º (+9) en su peor Masters, le colocó la chaqueta verde. E inauguró una era.