Al Etihad sin miedo
Arenga en el vestuario antes de la gran batalla ● Se prevé algo muy diferente al año pasado: nueva defensa, pivote y ataque ● El Madrid percibe que le dan por muerto y eso motiva
Hasta el final’, como reza el lema, transcripción del ADN de un club que mañana no sólo se juega media temporada, también cuarto de orgullo. Porque al Madrid lo dan por muerto y eso ha llegado al vestuario, tocado la fibra de un equipo que se sabe con la oportunidad de reivindicarse. Con orgullo, a callar voces. Sabedor de que eliminar al City en su casa, ante su gente y tras no haber vencido en el Bernabéu (3-3), supondría partir el tablero. En el club existe la sensación de que el 4-0 del año pasado es historia. Casualidades de la vida, mañana se cumplirán exactamente once meses de aquello. Sucedió un 17 de mayo; y en un 17 de abril, la ambición es cambiar la historia. Se transmiten argumentos para pensar que será diferente. Tambores de revancha.
Un equipo invencible. El Real Madrid ha disputado 44 partidos esta temporada: 31 de Liga, nueve de Champions, dos cruces de Copa y dos de Supercopa. Pues de los 44 resultados, sólo uno le eliminaría en 90 minutos: el 3-1 en el Metropolitano. Es la radiografía de una temporada que desde dentro se percibe infravalorada. “No siempre hemos jugado bien, pero sí competido... y eso es lo bueno”, dijo Ancelotti. “Se habla mucho de la calidad, pero lo que más buscamos es el compromiso”, amplió. Secreto de un grupo que sólo ha perdido un partido, en 90 minutos, de 44. Si calca cualquiera de los otros 43
resultados, como mínimo llevará el cruce a la prórroga.
Nueva defensa. Once meses dan para muchos análisis y en ellos se ha detectado que la defensa, entonces,
hizo aguas. Pero la de mañana será muy diferente: sólo repetirá Carvajal. La temporada pasada el muro estuvo completado por Militao, Alaba y Camavinga. Este curso, lo compondrán Rüdiger, Nacho
Espejos
De los 44 resultados este curso, 43 llevarían mínimo a la prórroga
y Mendy, con especial énfasis en Rambo, factor diferencial. “Sí, será titular en la vuelta”, bromeó Carletto en Mallorca, sabedor de que la temporada pasada, pese a su gran actuación secando a Haaland en la ida, quitarlo en Mánchester fue un error. El equipo confía en que esta vez el kaiser sea crucial. Que la línea defensiva ofrezca mejores prestaciones.
Confianza en Camavinga. También cambiará el cerrojo: hace once meses fue Kroos quien actuó en la posición, escoltado por Modric y Valverde. Un trivote mágico... pero al que le faltó físico. Esta vez estará Camavinga, quien reluce un momento de forma espectacular y asume la misión de, precisamente, reforzar el centro de la defensa, incrustándose entre los centrales. Habrá más contención en la sala de máquinas, más energía, más sudor. Esa dosis de músculo debe contrarrestar la superioridad que hace once meses resultó aplastante. Innegable. Mucha confianza en esta variable.
‘Factor Bellingham’. Ojalá en la cuna del ‘Hey Jude’ (el City lo reproduce en su estadio desde hace años, casi como un himno oficioso), Jude lo entone con más fuerza. Que vuelva su versión demoledora y goleadora. De sus 20 dianas, sólo ha firmado tres en 2024. Un notable desierto. Pero es entre las dunas... donde aparecen los oasis. Y en el otro hogar de los Gallagher, Bellingham ambiciona con resarcirse. Confirmar su mejoría tras un buen hacer en Palma. El inglés nunca ganó al City y tiene una deuda con él: estando en el Dortmund fue su verdugo en la 2020-21 (también en cuartos de final) y su rival en la fase de grupos de la 2022-23. En esta última, marcó un gol: ya sabe lo que es rugir en el Etihad. Pero nunca ha logrado ganar al City...
Una nueva forma de atacar. Ancelotti mantendrá el esquema de dos balas por la izquierda, con Rodrygo caído a banda y Vini más centrado. Una fórmula que sorprendió en el Bernabéu e intimida para la vuelta. “Vini es tan humilde que ha entendido que es un sistema que favorece al equipo”, dijo Ancelotti. Una solución que promete. El Madrid saldrá a por el partido, irá a ganar, a reivindicarse en el Etihad. Le dan por muerto y eso le motiva.
Esperanza Bellingham nunca ha ganado al City, pero sí hizo gol en el Etihad