Lorenzo destroza al Baskonia
El Maccabi, con 29 puntos del internacional español, es séptimo y se cruzará con el PAO
Otra oportunidad
El equipo alavés será 8º y se medirá con el Madrid si gana el viernes
Lo más cerca que estuvo el Baskonia de ganar el partido ante el Maccabi (113-85) fue cuando sonaba el Devotion de la Euroliga y no había comenzado el compromiso. Y es que al final del primer cuarto, las cosas iban 28-15. Los macabeos habían conseguido seis triples, dominaban el rebote (especialmente el ofensivo) y los vitorianos no mordían. El Stark Arena, con 250 seguidores de Israel, asistía a un dominio amarillo.
La derrota deja a los vascos con una única bala para alcanzar el playoff de la Euroliga: deben vencer en el Buesa, en casa, el próximo viernes (20:30) a la Virtus Bolonia para acceder a los cuartos. Si logran el pase, lo harán como octavos clasificados y se enfrentarán al Madrid al mejor de cinco partidos, en formato 2-2-1 y con ventaja de campo para los blancos.
El choque comenzó con un triple de Lorenzo Brown, una pérdida de Moneke y el segundo misil del de Albacete para marcar distancias desde los primeros compases. El base internacional español completó una actuación redonda con 29 puntos (7 de 8 en triples), 5 asistencias y 35 de valoración. Por si las cosas podían empeorar, Moneke se torció el tobillo izquierdo y se marchó al banquillo lesionado en el segundo cuarto y es seria duda para el viernes. “No tenemos intensidad”, decía Ivanovic al descanso.
La vuelta de vestuarios arrancó con un triple de Howard. Con el 55-41, el Baskonia amenazó con volver pero los hebreos siguieron certeros desde la larga distancia y de nuevo abrieron brecha. En el minuto 25, Brown llevaba 26 puntos, con 6 triples convertidos. Su equipo un 12/21 desde esa distancia. El único que respondía con penetraciones y lanzamientos de media distancia era Codi Miller-McIntyre (acabó con 32 tantos y 45 de valoración).
El novedoso play in comenzó muy mal para el Baskonia, que tendrá este viernes una segunda oportunidad. El Maccabi, por su parte, acaba séptimo y se cruzará con el Panathinaikos. Jugando a este nivel está capacitado para llegar incluso a la Final Four de Berlín.