Dos Mundiales en solo ocho años para crecer
España organizará también la cita para 2029
Galicia, Valencia, Málaga e Irún serán sedes del Mundial de balonmano femenino en 2029, que ayer se le concedió a España. Con suerte, las Guerreras disputarán la final en diciembre en la ciudad vasca, en la que se darán cita las dos mejores selecciones. La buena acogida española al Campeonato del Mundo en 2021 marcó un buen precedente para que el país se convierta en epicentro del balonmano en los próximos años. A la vista está la organización, también exitosa, de los Preolímpicos en Torrevieja, en los que, además, las españolas se hicieron con el billete a París.
“La totalidad de países que tomaron parte en estas competiciones han reconocido la atención y los estándares de calidad organizativa de nuestra Federación”, recordó ayer su presidente, Francisco Blázquez. No será la única competición relevante en cartera de la RFEBM, pues en 2028 ya está programado el Europeo masculino que se celebrará de la mano de Portugal y Suiza. “Me siento tremendamente orgulloso”, reconoció un Blázquez, que asumió el “nuevo reto” ilusionado por la relevancia internacional que ha adquirido la Federación.
Ahora, el primer objetivo del presidente es el de sacar del cajón el plan de promoción del balonmano femenino que se frenó por la pandemia del COVID-19 con el anterior campeonato, que se salvó con beneficios, para así demostrar que que la organización de grandes eventos no solo es una oportunidad excepcional en lo deportivo, sino también en lo social. “Debe servir como la mejor correa de transmisión para poner en valor nuestro deporte”, reiteró.
En 2029, Alemania y Francia serán las anfitrionas del Mundial masculino de balonmano; mientras que en 2031, la cita femenina tendrá lugar en República Checa y Polonia; y la masculina, en Dinamarca, Islandia y Noruega.