Magia blanca
Los futbolistas saben que hay que jugar los dos partidos con la máxima entrega, sacrificio e intensidad
El Real Madrid todavía no es campeón de Liga, pero después de la victoria en San Sebastián, quedando solo 15 puntos por disputar y aventajando al Barça en 14, que se podrían reducir hasta en tres si gana hoy al Valencia, más el average, parece que no se les escapará a los blancos ganarla por trigésimo sexta vez.
La atención y la pasión de los madridistas estos días está en la Champions. El Madrid jugará mañana en el Allianz Arena el partido de ida de semifinales contra el Bayern Múnich y la vuelta en el Bernabéu la semana que viene. El Bayern es uno de los grandes de Europa al que los blancos se han enfrentado en la máxima competición europea en 26 ocasiones, con 12 victorias merengues, 11 derrotas y 3 empates. En las últimas tres eliminatorias, dos en semifinales y una en cuartos, pasó el Madrid, ganando cinco de esos seis partidos y empatando el otro. La última vez que eliminaron al Madrid fue en el año 2012 en el Bernabéu, en una tanda de penaltis para pasar a la final en la que fallaron sus lanzamientos Kaká, Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo, y marcaron para los de Baviera, entre otros, un tal Kroos y un tal Alaba. Dos años después, uno de mis hijos, Manu, con los seguidores madridistas en las gradas, vio marcar a Ramos y a Cristiano dos goles cada uno en el partido de vuelta de semifinales en Múnich, en la victoria más amplia de todos los enfrentamientos entre ambos equipos, 0-4, con Ancelotti en el banquillo del Madrid y Guardiola en el del Bayern. En esos partidos contra el tercer equipo, con el Liverpool, con más Copas de Europa, seis, hemos podido ver a algunos de los mejores jugadores del mundo: Beckenbauer, Maier, Gerd Müller, Hoeness, Rummenigge, Matthäus, Augenthaler, Kahn y Thomas Müller, entre otros muchos.
Es impresionante que el Madrid, en las últimas 14 temporadas, haya estado en 12 semifinales de Champions. A esta ha llegado eliminando al City, siendo favorito el equipo de Mánchester. Ahora, lo es el Real Madrid. Pero ese favoritismo no lo debe ser para los futbolistas del Madrid, que saben que hay que jugar ambos partidos con la máxima entrega, sacrificio e intensidad de todos, reitero, de todos los que salten al césped, para poder estar en la final de Londres. El Bernabéu, una vez más, está listo para otra noche de magia blanca en el partido de vuelta.