El Madrid presiona al Unicaja
Los blancos ganan al Obradoiro y son líderes con un partido más
Como el Unicaja andaba en asuntos europeos en Belgrado, el Madrid ha recuperado provisionalmente el liderato. Una manera de presionar a la escuadra cajista, aunque los pensamientos merengues parecían seguir en clave Euroliga.
El Monbus Obradoiro se exprimió al máximo, dejó una buena sensación e incluso llegó a viajar seis arriba (41-47). Le faltó, sin embargo, pegada y capacidad de generar más cosas en ataque. Su exigua anotación (69 puntos) era insuficiente para abrazar la hazaña. El canadiense Thomas Scrubb (25) estuvo solo en una línea exterior en la que a Dotson, uno de los fichajes para pelear la salvación, le faltó mucho acierto: 2 de 14 en el tiro. Con el Palencia ya descendido y con el Breogán y el Granada con un triunfo más, los de Moncho Fernández se la jugarán frente al Andorra en casa,
en Palencia y en la última jornada recibirán al Joventut.
En el Madrid, ningún jugador alcanzó los 22 minutos en pista, siete sumaron entre 7 y 13 puntos con buenos momentos de Causeur y un buen cierre de mañana de Tavares y Yabusele. Musa puso su granito de arena, imaginamos que también para echarle una mano a su Breogán. Sergio Rodríguez y Deck (con un golpe), descansaron.
Chus Mateo apostó en la primera parte en diferentes rotaciones por Causeur, Ndiaye, Alocén y Abalde. El mejor tramo vino al final del primer cuarto, en plena racha de triples: 2618. Los blancos rompían con el balón y el pasador encontraba a un tirador abierto o alguien bajo canasta. Hasta siete asistencias en esos diez minutos iniciales por solo tres del Obra… en toda la primera parte. En esa
dinámica, los de Moncho Fernández lo tenían muy complicado y supieron cambiar la inercia, se ayudaron de una defensa zonal. El Madrid se paró muchísimo, tanto, que le costó seis minutos meter la primera y cedió ese segundo cuarto 10-17.
En la reanudación, el Obra seguía ahí, sujetando al Madrid (más zona, cambios atrás…), aunque a costa de cometer demasiadas faltas. La renta visitante tocó los seis con un inspirado Scrubb y el Real respondió con sencillez, buscó la superioridad de Tavares. El bloque cerró, además, su aro, esos rebotes que tanta vida le habían dado a los de Santiago. La victoria cayó por maduración, por el peso de jugadores como Tavares y Yabusele. El Madrid, líder provisional, sigue con la mente en el playoff. “Nos tiene la cabeza loca”, decía bromeando Chus Mateo.