Buena mecánica con mala protección
1 Velocímetro con pantalla informativa. El color de fondo cambia según el estilo de conducción. El verde es para bajo consumo. Si se pone azul es que le estás poniendo el ahorro muy complicado.
2 Corrosión en los ejes, las vigas y las rótulas, así como en las chapas de los estribos, las puertas y zonas del motor. Pero es que circulamos mucho por el centro de Europa.
3 Entre la mecánica y las baterías de níquel e hidruro metálico serpentea el cable de alto voltaje. Todo está intacto, ninguna queja.
4 ’Delicatessen’: en vez de un propulsor de cuatro válvulas, Honda utiliza el ahorrador ‘motorcito’ de 1,3 litros. Para conseguir una combustión óptima le han puesto dos bujías por cilindro.
5 IMA significa ‘Integrated Motor Assist’: este bloque eléctrico apoya al gasolina. Con la mecánica de combustión y el cambio automático (CVT) conforma una unidad compacta. Está intacto. 6 Al final volvemos a encontrar corrosión: en las bisagras y bajo las gomas del portón trasero aparecen las primeras señales de óxido. La pintura también tiene restos. En las zonas visibles, el grosor de la pintura es solo de 80-110 milésimas de milímetro y en las zonas ocultas es de 65 o menos. Cuidado si vives en una zona costera.