Volvo XC40/ XC60
Volvo ha diferenciado claramente sus formatos de SUV: el pequeño XC40 es demasiado justo
SI PRIORIZAS EL ESTILO, VOLVO podría ser tu elección. ¿Te gusta el mapa de Gotemburgo como decoración o las inserciones de aluminio Urban Grid? Así de diferente puede ser un coche de la firma nórdica.
El pequeño XC40 tiene un estilo más propio aún, es práctico con más huecos portaobjetos y puede llevar carrocería de dos colores. El XC60 es, sencillamente, todo un Volvo. Amplio, imponente y unos 10.000 euros más caro en el caso de esta versión con el motor D3 diésel. Una diferencia de precio que casi recuperas cuando lo vayas a vender de segunda mano, pero, ¿cuánto de más recibe el propietario de un XC60?
Bastante simple: el XC60 es el automóvil que te colmará en las vacaciones en familia. Entra, respira, relájate. Así es como te hace sentir. Especialmente en la espalda y en el maletero, se nota la diferencia. Con su distancia entre ejes más larga, un adulto de gran altura entra genial. El motor de dos litros ofrece 30 Nm más de par que en el XC40, por lo que las prestaciones apenas se diferencian. Los 10,1 segundos para llegar a 100 km/h están en la media, pero su estilo sólido seduce y pide más: más potencia, tracción integral, cuero, cambio automático... Es un coche que incita a mirar la lista de extras.
Los 150 CV se quedan un tanto escasos en el XC60. En el XC40 el mismo motor se siente más brioso: se desplaza con más viveza y, además, en ciudad es más fácil encontrar aparcamiento. A cambio, los adultos irán más apretados en la segunda fila.
El pequeño ahorra espacio, ¿pero ayuda a ahorrar dinero? Este coche no necesita tracción en las cuatro ruedas, aunque no le sentaría mal y casaría con su personalidad. Dado que, en comparación con el XC60, los extras, son más baratos, el ahorro se puede aprovechar para el techo de color blanco o los llamativos faros LED. Todo es una cuestión de estilo... Y de lo que te quieras gastar en opciones, claro.