Que no se mareen en el coche

■ El mareo es un mal bastante común entre los niños de 2 y 12 años mientras viajan en coche. Pero, ¿por qué se ocasiona? Cuando el sistema nervioso humano recibe impulsos contradictorios -por ej., en los niños, el sistema motriz les indica que están quietos, sentados en el coche, mientras que el líquido presente en el oído interno les indica que se están moviendo-, se colapsa, causando el mareo. Hay personas más propensas a este mal que otras, pero los pediatras recomiendan seguir estos consejos para evitar su aparición:

Evita viajar inmediatamente después de las comidas, pero ojo, porque la hipoglucemia -falta de azúcar en sangre- también puede causar el mareo. ¿Lo mejor? Comenzar el viaje horas después de una comida ligera.

Haz una conducción suave, sin acelerones ni frenazos.

Que los niños se duerman. El mareo no se produce durante el sueño, así que una buena solución puede ser que viajéis de noche.

Que no dejen la vista fija en un punto, ya que esto, en contraste con el movimiento, facilita la aparición del mareo. Por eso, se desaconseja leer o ver películas en el coche si tenemos tendencia a marearnos. Asimismo, se recomienda que los niños que se marean viajen en el asiento central trasero, ya que así pueden mirar al exterior a través de la luneta delantera.

Mantén el habitáculo fresco y aireado. Un exceso de calor propicia el mareo, algo que también hacen los olores fuertes. Si ves que un niño empieza a marearse -se quedan en silencio y se ponen pálidos-, baja un poco las ventanillas o realiza una parada.

En última instancia, se puede recurrir a medicamentos como la Biodramina o Cinfamar infantil, que están disponibles en jarabe -desde 4,8 € /60 ml- o, incluso, en comprimidaos -desde 3,8 € /10-, pero su uso debe ser consultado con el pediatra.