Ojo a la garantía
En los modelos nuevos, lo habitual es tener una garantía de dos años sin límite de kilómetros, que es lo más extendido entre las marcas europeas, principalmente. Mientras, las asiáticas suelen recurrir a la fórmula de tres años o 100.000 km, como ocurre con Toyota y Suzuki; mientras que Hyundai y Kia se desmarcan con cinco y siete años de garantía, respectivamente.
En cambio, en los usados, lo normal es disfrutar de lo que le quede de garantía al modelo. Por ejemplo, si tenía dos años y el coche tiene seis meses, le queda un año y medio de garantía. Si la garantía oficial ya ha terminado, los vehículos usados ofrecen una de seis meses; excepto en el caso de los particulares, que no están obligados a dar ninguna.