¿Y SI TU COCHE NO PASA LA ITV?

Si la ITV de tu vehículo resulta negativa (por uno o más fallos graves, como los referentes en los frenos, pérdidas de combustible, problemas en los neumáticos…), tendrás prohibido circular, por lo que deberás llamar a una grúa para que lo traslade a un taller. Una vez solucionados los desperfectos, hay que volver a llevarlo a la estación en grúa para pasar de nuevo la revisión. El plazo para hacerlo es de dos meses y, si te pillan circulando, la sanción es de 500 € (sin posibilidad de reducción por pronto pago). Otra opción es que el resultado de la inspección de tu coche sea desfavorable (por fallos de alumbrado y señalización, elementos de acondicionamiento interior, emisiones…): en este caso, la ITV emite un certificado que sólo permite circular hasta un taller para resolver los fallos. La sanción por usar el coche para otro fin es de 200 € (que se reduce a 100 € si pagas en menos de 20 días naturales). En ninguno de los dos casos se restan puntos del carnet.