Va como un León normal, lo cual es positivo
● ESTA VARIANTE HÍBRIDA emplea un propulsor 1.4 TSI de 150 CV y un motor eléctrico de 115 CV que, cuando actúan de forma conjunta, son capaces de ofrecer 204 CV y 350 Nm. Esto implica que estamos ante el León más rápido actualmente a la venta.
LA BATERÍA PESA LO SUYO
Todo el que se plantee este e-Hybrid debe también fijarse en el León 1.5 TSI de 150 CV (con etiqueta Eco). Con respecto a este, el híbrido ofrece 54 CV más... siempre que tengamos la batería cargada. El problema es que este elemento, de 13 kW/h de capacidad, aumenta el peso de esta variante híbrida en 253 kg respecto al 1.5 TSI. Es cierto que nos puede aportar hasta 64 km de autonomía eléctrica pero, una vez se agotan, tenemos un coche más pesado con los mismos 150 CV. Por lo tanto, siempre que tengamos batería, tendremos un coche más prestacional; si está descargada, los registros serán peores que los del 1.5 TSI.
CÓMODO Y DIVERTIDO DE CONDUCIR
El León e-Hybrid se comporta de una forma parecida al resto de componentes de la gama. Es un coche con una buena calidad de rodadura y cuenta con una suspensión adaptativa (de serie) que ofrece un gran compromiso entre confort y contención de los movimientos de la carrocería. El cambio DSG de seis marchas es rápido y muestra un funcionamiento fluido.