LO TÁCTIL PUEDE SALIR CARO
DEPENDEMOS MUCHO DE LAS FUNCIONES QUE SE CONTROLAN A TRAVÉS DE LA PANTALLA CENTRAL DEL COCHE. ¿TE HAS PREGUNTADO CUÁNTO COSTARÍA SI SE ROMPIESE?
Tienes mucho cuidado a la hora de evitar romper la pantalla de tu móvil, ante el coste y la molestia que puede suponer tener que sustituirla? Pues, si conduces un modelo medianamente moderno, dotado de una pantalla táctil, debes saber que manipulas a diario un dispositivo que puede resultar más caro aún que el más grande y sofisticado de los iPhone. Uno que, además, cada vez acumula más funciones; muchas de ellas relacionadas con el confort (como el aparcamiento automático) o la seguridad (como la cámara trasera; además, en un futuro, no se podrá pasar la ITV en los coches nuevos si no pueden mostrar la cámara de marcha atrás).
Si estrellas, inundas o permites que la pantalla central de tu coche se deteriore (rayando su superficie, o limpiándola con algún producto químico agresivo, como un disolvente) te puedes ir preparando para un diagnóstico rápido y sencillo por parte del servicio oficial: habrá que sustituir la pantalla... o todo el módulo, con un coste de entre 600 y 2.500 euros (dependiendo de parámetros como si es sólo la pantalla o el head unit completo, y lo grande y sofisticado que sea el interfaz en cuestión).
Por suerte, existen opciones más baratas e igual de efectivas que la 'oficial': acudir a cualquiera de los reparadores especializados que se anuncian en Internet y que, por unos 300 euros, desmontarán la pantalla averiada y la sustituirán por una con idénticas prestaciones o, incluso, del proveedor original.
Y también podrías hacerlo tú mismo por unos 100 euros, porque es relativamente sencillo (aunque tendrás que invertir cierta cantidad de tiempo en investigar cómo hacerlo) ya que suele tratase de unidades genéricas producidas por un tercer fabricante y fácilmente desmontables.