SEAT 1.5 TSI 150 DSG TARRACO FR
ASÍ VA EL ACABADO DEPORTIVO FR LLEGA AL TARRACO, EL MONOVOLUMEN MÁS GRANDE DE TODA LA GAMA SEAT. PROBAMOS LA VERSIÓN DE GASOLINA Y 150 CV.
Las siglas FR llevan ya casi 20 años identificando al acabado deportivo de Seat. Nació como una terminación intermedia entre la Sport, ya desaparecida de la gama, y la Cupra, que hoy tiene marca propia. Desde entonces FR o, lo que es lo mismo, Fórmula Racing ha sido una constante en todos los modelos de la marca, que han contado siempre con una variante de este tipo.
En el caso del Tarraco, la terminación FR aparece con fuerza, tanto que está disponible para las cinco mecánicas con las que se ofrece este SUV de 4,73 metros de largo que puede contar tanto con cinco como con siete plazas.
En cuanto al acabado, el Tarraco FR incluye unos paragolpes más deportivos pintados en color de la carrocería, llantas de 19 pulgadas de serie (las de esta unidad son unas todavía más exageradas de 20", por 970 euros) y detalles en gris en sitios como los retrovisores, la parrilla delantera...
En el interior, junto a los asientos deportivos, los pedales de aluminio o el volante FR achatado en su parte inferior, destaca también la completa dotación de serie, con elementos como el Virtual Cockpit (es decir, la instrumentación digital configurable) o la pantalla táctil central de 10,25 pulgadas, la más grande ofertada para el Tarraco.
En el aspecto mecánico, la mayor diferencia está en la suspensión deportiva de serie, que ofrece unos tarados más firmes (y que, por 850 euros, puede ser sustituida por la suspensión adaptativa DCC que llevaba nuestra unidad de pruebas).
Con todo, algunos os preguntaréis si tiene sentido un acabado tan deportivo en un coche de corte familiar como el Tarraco. La respuesta es sí, porque básicamente es una mejora en aspecto y equipamiento. El comportamiento mejora levemente, lo justo como para que la comodidad no se vea comprometida, y la gama de motores se mantiene intacta.