6.- PUERTAS

Lo normal es que sólo escuches el golpe seco -pum- que se produce al cerrarlas. Si escuchas crujidos -croc croc- o chirridos -ñiiiiiiccc- cuando las abres y cierras...

■ INDICAN QUE el mecanismo de retención de las puertas necesita engrasarse, o se ha manchado de polvo o arenilla (habitual en playas). ¿Cómo se soluciona? Abre las puertas y, con '3 en 1' (5 euros aprox.), lubrica todos los puntos de retención. Después, cierra y abre ligeramente varias veces la puerta para que el aceite actúe y se distribuya por toda la zona.

Si escuchas que suena como si algo se hubiese soltado cuando cierras la puerta…

■ LO MÁS PROBABLE es que se hayan aflojado las sujeciones de los paneles de tapizado de las puertas o alguna pieza interna del elevalunas, aunque también puede deberse a que lleves algo suelto en la guantera de la puerta. ¿Cómo se soluciona?

Los guarnecidos suelen estar colocados a presión y/o con tornillos; si no puedes ajustarlos con las manos, tendrás que acudir a un taller (desde 20 euros). Si escuchas en marcha un golpeteo rápido en la zona posterior de la puerta delantera -tac tac tac-... ■ COMPRUEBA QUE LOS CINTURONES de seguridad de las plazas que no estén ocupadas no golpean contra el guarnecido de las puertas o contra los pilares de la carrocería. ¿Cómo se soluciona? Un truco casero es pegar un pequeño trozo de velcro (por no más de 5 euros) en la hebilla del cinturón para que, cuando no se utilice, quede pegado al pilar o al lateral del asiento.