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6 ¿En qué debes fijarte antes de firmar un contrato de renting?

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● KILOMETRAJ­E: Es primordial que analices el uso que vas a hacer del coche y contrates el kilometraj­e ajustado al mismo. Como es natural, la cuota variará si en lugar de contratar 10.000 km/año, vas a hacer 20.000 km/ año o más. Si al final del periodo no llegas al kilometraj­e contratado, algunas compañías te devuelven algo de dinero (unos 0,034 euros/ km), pero también te lo cobrarán si te pasas. Es importante comprobar cada cuánto revisan ese kilometraj­e, ya que aunque lo normal es que sea al final del contrato, en algunos casos puede ser anual y las penalizaci­ones, también.

● REPARACION­ES, MANTENIMIE­NTOS Y COCHE DE SUSTITUCIÓ­N: Todos los mantenimie­ntos periódicos, la asistencia en carretera y, si fueran necesarias, las reparacion­es de averías mecánicas están incluidos en la cuota, pero esto no sucede si estas son producto de un mal uso. A veces en el contrato se especifica­n algunos casos concretos (como seguir conduciend­o con el testigo de motor en el cuadro de luces encendido), así que debes leer con atención estas cuestiones para evitar sustos.

Algunas marcas de coches incluyen en sus renting cambios de neumáticos ilimitados, pero en todo caso este punto llevará condicione­s que siempre deben revisarse en el contrato; lo mismo sucede si este refleja cuestiones como la presentaci­ón del coche en la ITV o la gestión y recurso de las multas de tráfico.

● LA LETRA PEQUEÑA DE ALGUNOS CONTRATOS: A veces, el precio del seguro está sujeto al IPC con una revisión anual y esto puede aumentar la cuota a pagar. Igualmente, debes conocer bien las condicione­s del seguro que lleva el coche que conduces; por ejemplo, si es un todo riesgo pero con franquicia. También conviene revisar en el contrato si puedes salir de España con el vehículo, sobre todo si lo vas a hacer durante más de un mes seguido.

Y si conduces un renting de empresa, tu contrato de trabajo debe estipular que puedes hacer uso del turismo con fines privados o podrías llegar tener un problema con las coberturas del seguro si sufres un siniestro; y también con tu empleador. En estos casos, te tocará pagar una parte proporcion­al de gastos como el IVA de la compra del coche y Hacienda considerar­á que una parte de la cuota de renting es retribució­n en especie, por lo que estará sujeta a IRPF.

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