Ove Anderson fichó a Carlos Sainz para el equipo Toyota por ser especialista en asfalto.
pensar que en España todos vivimos en Marbella y que nos pasamos la vida tomando el sol en la playa… Si supieras que en el sitio donde vive Dani Sordo llueve casi tanto como en casa de Neuville, tal vez no estarías sosteniendo esa teoría…» «¿En serio?» , me contesta, incrédulo. Mientras, pienso en la belleza de Cantabria, en Dani Sordo de chaval, conduciendo (incluso sin carnet) por Peña Cabarga, la Bien Aparecida, Alisas, San Pedro del Romeral… con lluvia, con niebla y hasta con nieve… No se me ocurre mejor manera de despedirme de mi buen amigo Markus con un «¡mañana me lo cuentas!»
Hoy todos conocemos el resultado. Pudo ganar cualquiera de los dos, pero de aquella pelea a cara de perro que se prolongó hasta el último metro del último tramo, fue Dani Sordo quien emergió victorioso. Lo hizo tras dejar claro que en el asfalto sí se siente en su feudo y allí corre tanto como el que más. Paradojas de la vida, su falta de sintonía con la tierra, particularmente con el Citroën DS3 WRC con el que corre este año, le llevó a verse apeado del viaje a Australia, donde Kris Meeke ocupó su lugar. Un argumento que ha devuelto a la actualidad su condición de especialista de asfalto, etiqueta que muchos otros pilotos han llevado, por obra y gracia del mayor o menor acierto de quien se la colgó.
Lo cierto es que los pilotos especialistas han existido siempre, tanto los de tierra como los de asfalto. También los de hielo. Incluso los especializados en un terreno muy concreto, como el antiguo Rallye Safari. Pero tradicionalmente han sido aquellos que solo eran capaces de lucirse en pruebas como Suecia o Finlandia los que han disfrutado de la condición de mitos. Da la impresión de que acumular victorias allí otorgaba el pasaporte directo a la condición de leyenda, mientras que dominar sobre el asfalto, para quienes otorgaban dicha condición, no era más que la expresión de la vulgaridad… Partiendo de la base de que los especialistas en uno u otro terreno y que no brillan en el otro no son sino pilotos incompletos, cabe invocar ahora nombres como Jean Ragnotti, Didier Auriol, Philippe Bugalski, Chus Puras, Gilles Panizzi, François Delecour, Bruno Thiry, François