Peugeot 205 T16
Con cuatro campeonatos del mundo y 16 victorias en rallies, el 206 T16 fue el mejor de los Grupo B. No fue solamente el coche, tuvo pilotos del máximo nivel y la eficacia característica de Jean Todt como responsable del proyecto y del equipo.
Peugeot fue la marca con más éxito en la era del Grupo B y, como casi siempre, por varias causas. La primera es que encargó el proyecto a Jean Todt, un hombre con una visión de la competición y una capacidad organizativa extraordinaria. Uno de los encantos de esta era no solamente fue la competición entre grandes coches y grandes pilotos, también entre dos jefes de equipo de la talla de Todt y Fiorio. La única condición que puso Peugeot fue que el futuro Grupo B tendría que tener el aspecto del 205, cuyo lanzamiento estaba previsto para 1983.
Todt confió la parte técnica a Des O’Dell, con quien trabajó en en Talbot. O’Dell dejó pronto el proyecto pero diseñó la estructura básica del 205 T16: motor central y caja de cambios en posición central transversal, para que las masas estuvieran más centradas y por aspectos prácticos, como la accesibilidad mecánica o que los cuatro semiejes fueran iguales, lo que facilitaba el trabajo de los mecánicos. Como en la mayoría de los grupo B, el bloque del motor provenía de los coches de serie pero, a diferencia del que tenían el el 5 Turbo, el quattro o el 037, el del 205 era muy reciente: el tipo XU de aluminio.
El plan de Todt era mostrar los primeros prototipos en 1983, correr en 1984 y ganar el campeonato en 1985. Estuvo a punto de equivocarse porque el 205 T16 era tan competitivo que podría haber ganado el campeonato ya en 1984. No fue así porque se retrasó la fabricación de las 200 unidades para la homologación, que no se pudo hacer hasta abril de 1984 cuando ya se habían disputado cuatro rallies. El primero al que acudieron fue Córcega, con dos coches. Uno era para Ari Vatanen, el primer piloto que ganó un campeonato del mundo con equipo privado; fue en 1981 con el Escort RS1800 de Rothmans (mucho después también lo han hecho Loeb y Ogier). El otro, para Jean-Pierre Nicolas, el piloto de desarrollo.
Córcega era un rally favorable a los dos tracción trasera, el 037 y el 5 Turbo y, de hecho, Bettega empezó mandando. Pero la carretera estaba cada vez más resbaladiza por la lluvia y en el octavo tramo VatanenHarryman consiguieron una ventaja suficiente para colocarse líderes. Estuvieron ahí hasta que, en el vigésimo, un aquaplaning los dejó fuera de carrera. Quedó claro que el el 205 T16, que tenía lo mejor del 037 (motor central) y del quattro (tracción total y turbo) sería el coche a batir. Vatanen-Harryman ganaron tres rallies esa temporada y sobre superficies distintas: Finlandia, San Remo y Gran Bretaña. El 205 T16 iba deprisa en cualquier parte.
Vatanen permaneció en el equipo en 1985 junto con un extraño fichaje de Todt: Timo Salonen, un año mayor que Vatanen y con un palmarés que no hacía pensar que fuera un piloto de primera fila. Ese señor mayor, que además estaba un poco gordito, tenía gafas y fumaba mucho, fue el campeón del mundo de 1985 y el piloto que más rallies ha ganado en la era del Grupo B. Para la temporada 1986 Todt también fichó a un piloto que entonces tenía un palmarés muy escaso, un tal Juha Kankkunen.