BMW M340I XDRIVE
VALOR EN ALZA
El Serie 3 quiere volver a ser la referencia entre las berlinas medias Premium y eso es lo que se ha buscado en la séptima generación. Como era de esperar, mejora notablemente en todos los apartados, especialmente en su nuevo chasis que le puede volver a aupar al trono en el segmento, en dura pugna con el Alfa Giulia. Emplea en toda su gama unos nuevos amortiguadores con topes hidráulicos que, combinados con un bastidor mucho más rígido, se obtiene un resultado espectacular. A la vez aumenta la anchura de vías, baja el centro de gravedad en 10 mm, y reduce el peso en 55 kilos con el tradicional reparto 50:50.
Hay varios motores en la nueva Serie 3, todos ellos más potentes y eficientes, pero nos centraremos en el más deportivo por el momento, el del M340i xDrive, con su seis cilindros en línea y 374 CV, aunque habrá que esperar a julio para poder hacernos con é; en un futuro habrá un híbrido enchufable con 60 km de autonomía eléctrica, el 330e iPerformance.
Esta versión M340i xDrive ofrece de serie el diferencial trasero autoblocante con control electrónico, hecho en aluminio y 7 kilos más ligero que el anterior, opcional para el resto de la gama. Se puede combinar con la suspensión M Sport adaptativa y unos frenos M Sport con discos de dos piezas, en los que la superficie de fricción es de hierro y el núcleo de aluminio, con las pinzas de freno fijas de cuatro pistones delante y un pistón atrás, pintadas de color azul con el logotipo M. Esta suspensión M Sport es la ideal para las prestaciones del M340i que acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos. Es firme en el bacheo, pero no incómoda y sí muy efectiva en la pista, sin balanceos y con un aplomo increíble. Sin duda el trabajo efectuado en el chasis del nuevo Serie 3 es fantástico, pero también se aprecia un motor con más rabia, de tal forma que han logrado convertir al anterior M340i de la generación F30, que pecaba de burgués, en un deportivo en toda regla en esta nueva generación G20.