QUIEN DA PRIMERO…
BOTTAS TIENE CLARO QUE ESTE AÑO TIENE QUE DAR UN GOLPE EN LA MESA. EL AÑO PASADO SACRIFICÓ UNA VICTORIA POR EL TÍTULO DE HAMILTON, PERO ESTA TEMPORADA QUIERE DEJAR CLARO QUE PELEARÁ CON EL BRITÁNICO DESDE EL PRIMER DÍA. Y, DE MOMENTO, ES EL LÍDER DEL CAMPEONATO..
La victoria que se le resistió durante la temporada pasada le ha llegado a la primera oportunidad en esta de 2019. Pero a Bottas no le ha llovido del cielo, ni ha sido fruto de las circunstancias o la casualidad, sino que ha sido gracias al excelente trabajo durante todo el fin de semana, cimentada con unos entrenos que pusieron contra las cuerdas a Hamilton y a una espectacular salida consolidada con un ritmo de carrera impresionante. Resultado: una victoria inapelable desde el primer metro hasta el último.
Perder en Australia después de lograr la pole no es nuevo para Hamilton. De hecho se le da muy bien los entrenamientos pero siempre sucede algo en la salida. Lleva seis poles consecutivas y solo una vez ha logrado ganar la carrera (2015). Desde entonces ha visto como sus rivales en parrilla que salían detrás le han adelantado por diferentes circunstancias. Pero quizás la de este año ha sido la más sorprendente. Su compañero de equipo Bottas realizó una magnifica sesión de calificación, pero no le pudo superar. Si embargo en la salida, por la zona sucia, realizó una de las mejores arrancadas y se colocó primero. Pero no solo eso, sino que se puso a tirar con un ritmo que no pudo seguir ni el mismísimo Hamilton. También es verdad que el británico hizo una estrategia diferente y no le dio muy buenos resultados. Siempre a principio de temporada hay que entender el comportamiento de las gomas que este año cuentan con una banda de rodadura 0,4 mm más delgada para combatir el blistering. Así que el británico entró muy pronto a cambiar de gomas para protegerse de la entrada de Vettel que había hecho una mala salida también. Mientras tanto, Bottas se quedó en pista comprobando, para su sorpresa, que seguía rodando más rápido; así que aguantó en pista muchas más vueltas poniendo unas gomas nuevas para llegar al final con mejores opciones.
Porque la sensación que dio es que al poner el compuesto medio no se mejoraron las prestaciones y tanto Hamilton como Vettel sufrieron al haber entrado muy pronto. El primero tuvo que aguantar el aliento de Verstappen y el segundo el de su compañero de equipo Leclerc, debutante en Ferrari. Sin duda no fue una carrera agradable para ninguno de los multicampeones del mundo. No así para los jóvenes Verstappen y Leclerc que se reivindicaron por todo lo alto. El holandés salvó el honor de Red Bull y, sobre todo, de Honda. El motorista por fin logra un podium en su etapa híbrida, después de tantas decepciones. Este resultado también deja en evidencia a McLaren, ya que no supo aportar el coche que se necesitaba para ese motor. Y no parece que vayan muy bien las cosas este año tampoco, teniendo en cuenta el resultado de Sainz en su debut con el equipo británico. Una retirada por rotura de motor no parece un buen presagio. Aunque la decepción del español no fue tan cruel como la de Ricciardo que delante de su público, en casa, con el debut en Renault, tuvo que padecer como se arruinó su carrera en la salida al arrancar el frontal con un bache cuando intentaba adelantar por la hierba.
Las conclusiones que hay que extraer de este Gran Premio es que Mercedes sigue tan fuerte —o más— que el año pasado. Que Ferrari no lo está tanto como parecía. Que un motor Honda puede incluso ganar carreras si está bien arropado por un equipo como Red Bull. Que la batalla en Ferrari va a ser cruenta, porque Leclerc llega pisando fuerte. Y Haas arranca muy bien y está muy por encima de equipos con mucho más presupuesto.