EL CHASIS REGULABLE ES TAN BUENO QUE NO NECESITA DIRECCIÓN TRASERA
«BLACK SERIES», SINÓNIMO DESDE 2006 DE «TODO LO POSIBLE»
EL SONIDO DEL MOTOR ME RECUERDA AL V4 DEL PORSCHE 919 HÍBRIDO DE LE MANS
El orificio de ventilación mucho mayor que en las variantes GT anteriores proviene directamente del GT3 de competición. Deflectores con forma de media luna en el faldón delantero, Air Curtains, el capó de fibra de carbono con dos salidas de aire de gran tamaño, las rejillas de ventilación en los guardabarros de fibra de carbono delanteros o los bajos revestidos casi por completo con aletas longitudinales especiales... aunque no esté adornado con dorsales ni adhesivos de patrocinadores, el Black Series y su puñado de medidas aerodinámicas recuerdan a sus parientes de competición.
Con el alerón trasero regulable manualmente en dos niveles se ajusta el equilibrio aerodinámico. Para la actuación en Hockenheim, el perfil superior del alerón se coloca en posición plana, mientras el perfil inferior se ajusta lo más levantado posible. Además, la pala superior cuenta con un flap móvil. Este elemento aerodinámico activo se controla electrónicamente según el programa de conducción o el estado de marcha y se levanta unos 20 grados. Por ejemplo, en el modo ‘race’: entre los 20 y los 250 km/h, el flap está desplegado de forma permanente para generar efecto suelo adicional.
Plena concentración durante los últimos preparativos antes de que el GT Black Series despegue para su vuelo bajo sobre la pista de Hockenheim: ESP off, modo ‘race’ activo, amortiguadores ajustables en «Sport Plus», control de tracción en nivel siete de nueve (nivel uno: control de tracción completamente activado, nivel nueve: derrape máximo).
Acto seguido, el súper AMG toma impulso en la Curva Sur y sale disparado por la recta de salida hacia su vuelta rápida. El sonido a plena carga del Flat-Plane-V8, más claro y ahora con cierto golpeteo, recuerda al motor de competición V4 de dos litros del Porsche 919 híbrido, varias veces vencedor en Le Mans. Pero eso es ser tiquismiquis al máximo.
¿Velocidad máxima del Black Series en la recta de salida? ¡230 km/h! En materia de dinámica longitudinal, el deportivo juega en la liga de campeones. Comparativa de cronos con el Ferrari 488 Pista (235 km/h), el McLaren 720S (231 km/h) y el Manthey-Porsche 911 GT2 RS MR (231 km/h).
Frenada, sexta marcha, quinta, cuarta, con 147 km/h de velocidad en el centro de la curva, el GT toma la Curva Norte al vuelo con fuerza. La dirección de alta precisión combina a la perfección con una excelente estabilidad de marcha. Como siempre, la adaptación es ideal: la di
rección hidráulica da una respuesta exacta, pero sin pasarse de agresividad.
Nuevo referente en dinámica transversal. Con 1,45 g en la Curva Norte, el agarre mecánico y aerodinámico dan ahora los primeros compases de la sinfonía de aceleración transversal. Primer récord en la comparativa de deportivos: Ferrari 488 Pista (133 km/h), McLaren 720S (134 km/h) y Manthey-Porsche 911 GT2 RS MR (146 km/h).
Seguimos en dirección a la Curva 2. Más fascinante todavía que la aceleración longitudinal –según la ficha técnica, el Black Series necesita 9 segundos de los 0 a los 200– es la deceleración. 15,7 m/s2 al frenar en la Curva 2. Frenamos tarde en la curva hasta el bordillo del lado derecho, el Black Series brilla por su sensacional regulación ABS, sin parangón en esta liga.
A pesar de frenar tarde, pisamos pronto el gas: al acelerar desde el giro a la derecha de la Curva 2, seguido del cambio a la curva a la izquierda que lleva a la Parabólica, a menudo tenemos que luchar contra el sobreviraje de las potentes máquinas con tracción trasera. Ni rastro de ello en el Black Series: aquí puedes pisar el acelerador con ganas hasta el piso sin que la zaga del AMG se desvíe.
Este GT extremo brilla con un elevado nivel de tracción que marca nuevos referentes, no solo en la gama de deportivos. Aventaja incluso al McLaren Senna, que como es bien sabido se trata de un superdeportivo de otra liga. En gran parte se debe al concepto multinivel del control de la tracción, que se puede adaptar a la perfección al nivel de agarre de los neumáticos y el firme.
Tomamos aire y soltamos algunos detalles mientras el Black Series se abalanza sobre la Parabólica. En realidad, era de esperar que llevara un chasis ajustable especialmente desarrollado, cuyos parámetros relevantes para la dinámica de marcha, como la convergencia, la caída, la altura de marcha y los estabilizadores (con dos niveles de ajuste en el eje delantero y tres en el eje trasero), se pueden ajustar de forma específica a cada circuito. Y la calidad del chasis ajustable se refleja también en el hecho de que los ingenieros han prescindido de la dirección del eje trasero.
Otro punto fuerte: los neumáticos del AMG GT Black Series. De serie lleva los Michelin Pilot Sport Cup 2 R con el distintivo MO1A. Este tipo de neumático fascina especialmente en la ronda rápida con un agarre en seco propio de un neumático liso. Una característica diferenciadora de AMG es que el Cup 2 R para el Black Series está disponible en dos fórmulas de neumático. El Cup 2 R MO1A es la mezcla blanda de nombre “Soft Compound”, el flanco luce una silueta insinuada del Black Series. Como opción, está disponible el