TIERRA DE SUPERVIVIENTES
OGIER HA SIDO UN SUPERVIVIENTE EN CERDEÑA Y HA LOGRADO EL MAYOR ÉXITO. AUNQUE SU VICTORIA NO SOLO SE BASÓ EN LAS DESGRACIAS DE SUS RIVALES EN HYUNDAI, TAMBIÉN SE CIMENTÓ EN UN COMIENZO DE RALLYE ESPECTACULAR, DONDE NO CEDIÓ MUCHO TIEMPO A PESAR DE ABRIR P
Cerdeña es uno de los rallyes más traicioneros del Mundial y Sordo ha sido su dominador en los dos últimos años. Llegaba como favorito porque además tiene a su favor un buen orden de salida, ya que no hace el campeonato completo y no está arriba en la clasificación. Por el contrario Ogier es el perjudicado siempre por esta razón. Aun así hay que recordar que el francés tiene tres victorias consecutivas en esta prueba. Aunque también tiene el dudoso “honor” de haber perdido una edición, la de 2018, por solo 0,7 segundos (la segunda más apretada de la historia) contra Neuville.
Pero hay que reconocer que desde la salida Ogier parecía dispuesto a cambiar su racha. Porque a pesar de abrir pista, no cedió mucho tiempo respecto a los dominadores de la carrera, los Hyundai de Tänak y de Sordo. Sobre todo el estonio, que no paró de hacer scrach en el arranque, nada menos que cinco seguidos. Le secundó Sordo, como fiel escudero esperando su oportunidad a pocos segundos. Pero la sorpresa era un Ogier que abría pista pero no se descolgó de los dos Hyundai.
El sábado comenzaba también dominado Tänak, pero volvió a tener un percance y tuvo que abandonar cuando iba líder. Ya es el segundo rallye seguido que le sucede esto y le compromete sus opciones al título. Ogier todo lo contrario, se mantenía sólido e incluso ascendía a la segunda plaza antes de que el estonio abandonase. Motivo por el cual se colocó líder de la prueba con un Sordo como principal rival de cara a la victoria. Pero la mala suerte se
“Tuvimos un día increíble el viernes y ayer conseguimos volver a estar arriba. En el último momento, en el Power Stage, tuve un fallo de encendido durante mucho tiempo después del paso de agua. Sobrevivimos, pero perdimos un par de segundos ahí”.