MÁS DE UN SIGLO DE HISTORIA
EMPRESA FAMILIAR DESDE 1909
Henry Frederick Stanley Morgan fue un mecánico formado en la industria ferroviaria cuando la tecnología punta estaba en ese sector. Por diversión, en 1909 fabricó un rudimentario triciclo monoplaza con una curiosa suspensión delantera independiente. Despertó mucho interés, así que decidió producirlo, con ayuda financiera de su padre. En el Salón Olympia de Londres presentó algunas unidades pero se dio cuenta de que no tener dos asientos era un obstáculo. En 1911 hizo una versión biplaza, que se puede considerar el primer Morgan comercial. En parte por el éxito en pruebas de trial, la demanda fue creciendo hasta sobrepasar ampliamente la capacidad de producción.
El fundador murió en 1959 y lo sucedió su hijo Peter, una persona trabajadora y con buenas ideas y un criterio claro sobre cómo llegar la empresa. Tuvo aún más éxito con coches de serie y en competición, como la victoria de clase en Le Mans de 1962. Supo superar una etapa de declive desde mediados de los 60, por la caída del mercado americano. Desoyó a quienes insistían en que había que modernizar completamente el producto porque sabía lo que querían sus clientes. En los años 90, en parte debido a un programa de televisión en el que participó el propio Peter, hubo un resurgimiento de la marca.
Cuando Peter cumplió 80 años, en 1999, lo sucedió su hijo Charles. Ahí se inició un declive de ventas y un periodo de relaciones turbulentas en la dirección. Desembocó en la destitución de Charles, en 2013, y finalmente en la venta de la compañía al grupo Investindustrial, que ha sabido modernizar el producto manteniendo lo que sigue cautivando a los clientes.