SHERPA INDIO
El KUV 100 no sólo abre camino hoy como el nuevo SUV más barato del mercado; también guía el gran asalto de Mahindra a Europa: es el primero de 5 lanzamientos hasta 2022.
SIN GRANDES PRETENSIONES, PERO con un pequeño SUV muy económico y honesto en su propuesta, Mahindra asegura que desembarca definitivamente en Europa. ¿Verdad o globo sonda? Ya hemos visto en el tiempo anuncios similares, incluso de Tata, pero no conviene subestimar a grupos tan poderosos. Indio, presente en más 100 países y en sectores como el de la vivienda o el aeroespacial, es el primer fabricante mundial de tractores y acaba de completar las compras de Pininfarina, Peugeot Scooters y SsangYong. Ahora, anuncia en 5 años el estreno de un pick-up y de 4 nuevos SUV (dos con versiones 100% eléctricas, uno desarrollado sobre el Tivoli), y entre los que se cuenta ya este primer KUV100 de acceso. ¿Buen arranque?
MOCHILERO. No esperes, claro está, el SUV más sofisticado del mercado, pero, si la expectativa no es muy alta, el resultado resulta cuando menos sorprendente. Con sólo 3,70 metros es ya el todoterreno más pequeño junto al Suzuki Ignis, y el más barato. Sin embargo, por dentro se agiganta. Si su imagen no desagrada, a pesar de contar con pequeños neumáticos para lo que hoy se estila (pero que se muestran efectivos), por dentro es muy amplio. Sencillo y correcto en acabados, algún detalle como un tirador del freno de mano que parece sacado del 2CV le delata como producto sin gran esmero, pero más equipado de lo habitual por su precio, ofrece un tacto agradable, mucho hueco para objetos y, sobre todo, una 2ª fila muy espaciosa en todas sus cotas; tanto, que permite incluso acomodar a 3 adultos detrás gracias a su piso plano.
Arrancamos su único motor, un gasolina 1.2 atmosférico de 82 CV, que denota carácter de 3 cilindros, pero empuja con solvencia desde bajo régimen y estira bien
para mover con cierta alegría el pequeño SUV. Eso sí, con un lunar: consume hasta 1,6 l/100 km más que un Ignis 1.2 de 90 CV. Una dirección algo lenta (casi 4 vueltas de volante) pero que marca bien las trayectorias, unos frenos suficientes y con tambores traseros, y un cambio manual de 5 marchas tipo joystick, elevado, muy a mano y preciso, pero con recorridos algo largos, completan una puesta en escena que no asombra, pero que tampoco deja malas sensaciones en los pocos minutos de prueba. Siempre de tracción delantera, sus 17 cm de altura libre, el control de descenso siempre de serie y unos ángulos TT que más quisiera mucho SUV 4x4 (20º de ataque, 16,4º ventral y 29º de salida), suman más atractivo aún para zonas rurales. No sabemos cómo lo aceptará el mercado, ni si Mahindra completará la promesa de abrir en total 45 concesionarios (casi uno por provincia), pero el primer paso no parece en falso. ¿Un nuevo rival para Dacia?