CHATARRA
El 30 por ciento de los vehículos que se venden en España tienen más de 15 años, según datos de Faconauto, la patronal de concesionarios. Su destino, salvo contadas excepciones, debería ser un centro de tratamiento de residuos, lo que vulgarmente se conoce como el basurero. Pero no lo es, lo que supone un problema porque: uno, esos coches contaminan más y peor; dos, son menos seguros y con ellos la probabilidad de tener o resultar peor parado en un accidente es mayor. Los dos argumentos anteriores no son fruto de una sesuda re˜ exión. Son conocidos y cacareados por distintos sectores de la sociedad, incluidos aquellos responsables de renovar el parque automovilístico, que poco o nada hacen al respecto.
Según datos de Anfac, Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, en España circulan más de siete millones de vehículos con más de una década (un 22% del total) y, si las cosas no cambia -el equivalente a decir si no se aprueban medidas para renovar el parque o acabar para siempre con los coches más antiguos-, en 2026 habrá más de cuatro millones de vehículos con más de 20 años en las carreteras. Con ese panorama, que las emisiones de CO2 originadas por la circulación de vehículos se reduzcan en 2020 un 6% más (situándose en un 12% sobre el total), es casi ciencia ÿcción... a no ser que paguemos justos por pecadores, el famoso café para todos. Eso sí, a cambio nuestras carreteras serán todas vintage. Pues nada, nos iremos todos de guateque.