Vidas diferentes
A Lewis le criticaron mucho sus andanzas por la moda de Shanghái y su viaje a Nueva York antes de llegar a Singapur. Esos 10 días de asueto, lejos del mundo de las carreras, no le afectaron en lo más mínimo. “Yo sé lo que es bueno para mí y ya vi que me criticaron mucho, pero estos viajes y actividades fuera de la competición me relajan y me ayudan a volver con más ganas”, comentaba Hamilton tras la carrera. Ahora que tiene su propia línea de ropa con omm ilfiger patrocinador de Mercedes, está disfrutando de un mundo nuevo, el de la moda. Para Fernando Alonso su pasatiempo es otro. Saltó del McLaren en Singapur al simulador de Toyota en dos días. Cada uno tiene su forma de relajarse. Lewis en las pasarelas y Fernando sin bajarse de algo que tenga ruedas y volante. Los objetivos de ambos son diferentes y están en consonancia con el coche que llevan. Lewis aspira a igualar a Fangio y seguir a por el récord de Schumacher, y Fernando, consciente de que en la F1 no tiene nada que hacer por ganar, se orienta a otros récords que le pueden llenar de satisfacción y que le exigen más físicamente que los pasatiempos de Hamilton. A Fernando la motivación por ganar le lleva a un nuevo maratón de 5 carreras y ruedas de prensa, comenzando esta semana en Rusia y acabando el 30 de octubre en México. Cinco carreras en un mes de nuevo esta temporada, como en junio, y acabará con tres en diferentes continentes: Brasil, China y Abu Dabi.