HAMILTON ARROPADO, VETTEL PRESIONADO
Hamilton no se fía ni de él mismo y va carrera a carrera. La rotura de Malasia '16 le privó del título y sabe que no hay nada logrado hasta que los números dejen a Vettel 2º. El británico es un tipo singular, pero en el coche ha alcanzado una madurez que no tenía. Este año no cuenta con el mejor monoplaza, Ferrari está a su altura y en ocasiones mejor, pero su mentalidad es más fuerte que la de Vettel. Aunque esté durez le está llevando a igualar los cinco títulos de Fangio. Esa es la gran diferencia entre Vettel y él. El alemán se viene abajo en cuanto no está adelante, se queda bloqueado, y ese cambio de mentalidad que ha sufrido en Ferrari hay que atribuirlo a la forma que tiene la Scudería de gestionar sus recursos. Lewis en Mercedes es y se siente el jefe, todo está en torno a él y se sabe apoyado a muerte. Eso le da tranquilidad y no tiene la exigencia de Vettel. Hamilton ha ganado casi todo con Mercedes, al contrario que Vettel, que con Ferrari en cuatro años no ha logrado nada. Esta presión el equipo italiano no sabe quitársela al alemán, sino que le mete más, y eso le vuelve un piloto tímido en carrera, temeroso de los ataques de los rivales en el cuerpo a cuerpo. Si en Baréin en vez de Bottas, es Verstappen quien va detrás, Ferrari no hubiera ganado la carrera. Solo adelantó a Max en la primera curva, en la recta y con todo muy claro. En esta época de ferrarista, en cuanto hay riesgo de choque se echa atrás y así no se ganan títulos.