ADIÓS 2018, HOLA 2019
Se nos va, se nos ha ido 2018, un año marcado en el producto por la expansión incontenible del fenómeno SUV hasta superar sus ventas el 40 por ciento del total del mercado. El público es soberano y las marcas obedecen a las demandas populares con el efecto colateral de un aumento de emisiones medias de CO2. Preguntamos a algún máximo responsable de diseño mundial sobre el futuro después del SUV y nos dice que todavía hay recorrido, que lo que se esperan en los próximos años son variaciones alrededor de las posibilidades que ofrece este tipo de carrocerías. Habrá que estar pendientes de ese mercado chino donde de repente han vuelto a repuntar las ventas de las berlinas por si esta señal tiene visos de convertirse en tendencia futura llegando como llega del mayor mercado mundial. También ha sido un año raro en materia de mercado -Seat es la marca más vendedora y su León el modelo más vendido- con ese cambio a la vuelta del verano que obligó a rehomologar modelos a nivel de consumos/emisiones y que se ha traducido en ajustes a la baja de ofertas y marcas que aún no han normalizado todas sus gamas -no son pocas las opciones que se han quedado en el camino ya que se han priorizado las de mayor demanda-.Mientras tanto, electraaaeetra late lasasm leme te objetivos- y movilidad o inmovilidad según se entienda, siguen también ganando protagonismo proporcionalmente ala confusión que generan entre los usuarios unas normativas de cuestionable utilidad común que no van respaldadas por un claro apoyo público en forma de crear un caldo de cultivo interesante en materia de infraestructuras e incentivos a la adquisición para reducir emisiones y siniestralidad. Y por último en este resumen exprés de 2018, un recuerdo para ese, esperemos, hasta luego de Fernando Alonso a la máxima disciplina deportiva del automovilismo.#