Más que un complemento
Ya a la venta, o con los pedidos abiertos mejor dicho, se espera ver rodar a los primeros ID.5 en primavera de 2022, siempre asociado a la batería de 77KWh, la mayor asociada a la plataforma MEB. Su diferenciación respecto del ID.4 empieza a aparecer a partir del pilar B y es evidente a partir de la ventanilla trasera, con un techo más descendente y un alerón identificador sobre el portón del maletero. Dimensionalmente resulta mínimamente más corto y 3 cm más bajo que aquel, lo que sumado al tendido techo implica una pérdida en la cota de habitabilidad vertical trasera.
Una sutil mejora en aerodinámica (0.26 en vez de 0,28) y en la gestión de la energía permiten al ID.5 anunciar un aumento en la autonomía SUV, con hasta 520 km de autonomía sin recargar en las variantes de 128 y 150 kW. Algo menos, 480 km, podrán recorrerse con el ID.5 GTX de tracción total. Selectivamente, y en especial a baja velocidad, podrán accionarse conjuntamente para garantizar la motricidad en superficies deslizantes.
La recarga también incluye novedades, con potencias de hasta 135 kW (125 en el ID.4), que permitirían conseguir una recarga de más de 350 km en una media hora.