CASCO BONTRAGER SPECTRE WAVECEL
>>Bontrager se ha sumergido en una revolución en su repertorio de cascos, y el motivo no es otro que ofrecer una tecnología de protección superior a la que ofrece un casco estándar. Para ello y tras 4 años de desarrollo (en el que han trabajado un ingeniero biomecánico y un cirujano ortopédico), han creado el 4>SBCBI, una tecnología presente en 4 modelos completamente nuevos y del que hemos probado el Specter, una versión para XC/Carretera de gama media-alta (existe un modelo superior, el XXX Wave Cell). El núcleo de esta tecnología se basa en una estructura tipo malla o panal, compuesta de unas celdas tridimensionales con
forma de onda (de ahí el nombre), cubriendo todo el interior del casco, de adelante a atrás y de lado a lado. Su funcionamiento se basa en el movimiento y deformación de estas celdas cuando llega un impacto muy fuerte, de manera que sus paredes flexan absorbiendo la energía del golpe, algo así como el parachoque de un coche, solo que en este caso cuentan con una última fase de deslizamiento que redirige esta energía
hacia afuera, no hacia la cabeza. No hablamos aquí del clásico impacto lineal del casco cayendo contra el suelo (el equivalente a un peso que cae encima de la cabeza), sino de uno rotacional, es decir, donde nuestra cabeza impacta el suelo a medida que va girando en una o varias direcciones, lo que conlleva una energía rotacional, algo así como un centrifugado de nuestra cabeza, para entendernos. Las celdas al tacto, si las tocamos desde arriba o abajo, parecen muy rígidas, pero si metemos el dedo entre ellas y las forzamos, vemos cómo son flexibles y hacen su trabajo de amortiguación. Según Bontrager y Trek, respecto a un casco de EPS normal es 48
veces más eficaz, algo que no podemos comprobar sin acceso a las máquinas de medición y homologación usadas en la industria de la homologación. Las homologaciones de los cascos de hecho, muy pronto tendrán que evaluar este tipo de fuerzas rotacionales, algo que ha influido notablemente en los fabricantes. Si tenemos la desgracia de sufrir un accidente muy grande, el WaveCell quedaría completamente deformado y no volvería a su posición original, inutilizable, teniendo que sustituir el casco, algo que puede preocupar al comprador, pero hay que tener en cuenta que cualquier casco deja de ser útil tras un accidente de gran magnitud.
El Specter, sobre nuestra cabeza se siente muy envolvente y es uno de esos cascos que desde el principio sientes que su forma encaja muy bien con la de tu cabeza. El WaveCel implica un sobrepeso significativo, Bontrager habla de unos 50
gramos extra. 348 g es la cifra que marca este Specter en nuestra báscula, un tanto elevada si lo consideramos desde la perspectiva de un modelo de XC/Carretera. Sobre la marcha parece algo más ligero, gracias a que el peso queda muy repartido por toda la cabeza. El WaveCel no parece restar mucha ventilación, gracias a que las tomas de aire tienen un tamaño grande muy bueno. Es cierto que en los pocos días calurosos de esta primavera donde hemos pedaleado con él, en subidas lentas y bajo el sol de mediodía, nos ha parecido que esta estructura de plástico resta algo de frescura, aunque una vez aumenta la velocidad o comenzada la bajada, el aire vuelve entrar generosamente y te olvidas de esta sensación. El resto del casco tiene un nivel de construcción de mucha calidad, como las cinchas, de un tejido muy ligero y grosor muy fino, o el empleo del cierre FidLock magnético. Las almohadillas no son las que usan en los tope de gama pero sí son también de un grosor fino y están muy bien acabadas, y por último, emplea el sistema de ajuste con cierre Boa, que además de ser muy minimalista, se ajusta en 5 alturas distintas con mucho margen entre ellas, logrando mucha adaptación, tecnología que hacen que su precio sea competitivo. Durante el primer año además, su garantía te ofrece la sustitución gratuita en caso de accidente.