VIDA NÓMADA

La proliferación de las bicicletas de gravel ha supuesto también un aumento de los usuarios interesados en embarcarse en rutas de varios días. Los viajeros con alforjas siempre han existido, pero parece que ahora es más sencillo con bicicletas que explotan nuestro lado aventurero y, sobre todo, que nos garantizan comodidad para afrontar recorridos mixtos por carretera y montaña y, sobre todo, fiabilidad mecánica. También han puesto su granito de arena a este buen momento la facilidad para encontrar rutas y, por qué no, el aspecto positivo de las redes sociales –que los tienen- como inspiradoras para visitar lugares que otros nos han descubierto. En paralelo a las bicis gravel ha crecido la oferta de bolsas de bikepacking. Es decir, aquellas que se colocan en distintos puntos de la bicicleta sin necesidad de los portabultos tradicionales. De hecho, si te fijas en las bicis que hemos probado, apenas unas pocas tienen soportes en los tirantes para colocar una parrilla, una opción para transportar equipaje que sigue siendo la que más espacio nos ofrece, pero que quizá puede ser delicada para los cuadros de carbono. El kit básico de bolsas de bikepacking dependerá de cuántas jornadas quieras pedalear. Una ruta de fin de semana o tres días en verano, cuando el espacio que ocupa la ropa es mínimo, puede afrontarse con sólo una bolsa bajo el sillín o en el manillar, mientras que para viajes más largos, o en los que la condiciones meteorológicas no son tan benignas, será necesario llevar estas dos bolsas básicas y añadir también otras, como las que se colocan entre el tubo horizontal y el diagonal -conocidas como bolsas de cuadro- u otras pequeñas sobre el tubo horizontal, de las que existen multitud de tamaños diferentes, comenzando por las pequeñas que utilizan algunos cicloturistas para llevar geles o barritas en las marchas. Este kit de Zéfal, de su línea Z Adventure, es una buena opción por su excelente relación calidad-precio. Las costuras de la bolsa trasera son robustas y nos gusta el refuerzo de la parte inferior, mientras que la delantera, que sólo se abre por un lado, es totalmente impermeable. La bolsa trasera -74,95 €- ofrece 17 litros de capacidad y la delantera -49,95 €- tiene espacio para 10 l más, mientras que la bolsa de cuadro añade espacio para llevar las cosas que necesitamos tener a mano -si colocas ahí los cargadores, no tendrás que quitar las demás bolsas, que es una operación un poco laboriosa-. Con esta configuración hemos completado varios viajes de 3 días y también es suficiente para rutas más largas si tenemos la posibilidad de lavar la ropa. Existe una amplia variedad de opciones de distintos tamaños y calidades, entre las que seguro que encontrarás alguna que se adapte a tus necesidades.