Una startup madrileña gestionada desde Nueva York
Lady Pipa es una firma joven de moda femenina para eventos hecha en España que quiere transformar la manera tradicional de vestirnos para las ocasiones especiales. El objetivo es diseñar y confeccionar ropa de fiesta con la que seamos nosotras mismas, sin sentirnos disfrazadas.
La firma de moda femenina Lady Pipa nació en Madrid con el objetivo de cambiar la forma tradicional en la que viste la mujer para las ocasiones especiales pero, a su fundadora le surgió la oportunidad de mudarse a Nueva York y ahora gestiona el proyecto desde el centro mundial de emprendimiento. Tras esta decisión está Sara González, una abogada que dejó el despacho de abogados en el que trabajaba para dedicarse 100% al proyecto y dar el salto internacional.
“Todo comenzó en 2013 cuando me apunté a unas clases de costura que encontré en internet. Ese año me invitaron a unas cuantas bodas y no encontraba nada que realmente encajase con mi personalidad así que pedí a mi profesora que hiciéramos algunos vestidos juntas. Fue el principio de Lady Pipa y el fin de mi carrera de abogada porque me enamoré de la moda. Cuando fui a la primera boda vistiendo uno de mis vestidos… ¡no me lo podía creer! Otras invitadas se acercaban para preguntarme de dónde era y así se me ocurrió la idea de que las demás vistiesen mis diseños”, explica Sara González.
Durante cuatro años, Lady Pipa era un hobby para su fundadora que seguía trabajando a tiempo completo en un despacho de abogados en Madrid hasta que en julio de 2018 decidió dedicarse 100% al proyecto.
“Desde que estoy dedicando todo mi tiempo a Lady Pipa se nota un aumento exponencial de las ventas. En abril hemos multiplicado por siete lo que ingresamos en el mismo mes del año anterior. El objetivo es seguir creciendo hasta convertirnos en una marca de referencia para graduaciones, bodas y demás ocasiones especiales”, comenta Sara.
Algunos meses después, le surgió la oportunidad de mudarse a Nueva York y desde entonces gestiona la firma desde allí. Las colecciones se hacen en Madrid, aquí están los talleres, patronistas, proveedores, fotógrafos… y todo el equipo Lady Pipa, así que Sara vive entre las dos ciudades.
“Una ciudad como Nueva York ofrece multitud de oportunidades para aprender y seguir haciendo crecer la marca. Ahora mismo estoy en proceso de unirme a un workspace en Tribeca exclusivo para fundadores de proyectos del sector de la moda. El plan es que Lady Pipa esté presente en 15 países para 2020 y Estados Unidos es un punto clave para esa expansión porque es un mercado muy potente en el que las mujeres tienen claro que quieren ir cómodas también cuando acuden a un evento".